Por William Branley
1. Ninguna vida inteligente diferente a
la humana se ha comprobado que existe en otras partes del universo.
A primera vista esto parece ser verdad. Sin embargo,
uno necesitaría mirar directamente aquí en la Tierra para encontrar otras
formas de vida inteligentes.
Los estudios de los delfines y otros mamíferos
marinos grandes han revelado un nivel de inteligencia mucho más alto que lo que
previamente se creía. Esto revela que hay una gran cantidad de criaturas
inteligentes y medio-inteligentes en el universo conocido por nosotros con las
cuales compartimos el planeta. El hecho de que ellos florezcan juntos en este
pequeño planeta es una indicación excelente de que otras criaturas inteligentes
pueden existir en otras partes bajo condiciones adecuadas.
2. No ha existido el más simple
testimonio visual de OVNIS que no pueda ser explicado como un fenómeno natural
o humano. En consecuencia, todos los OVNIS deben ser tales fenómenos.
Este argumento usa una lógica errónea. Es posible
explicar casi todas las cosas con cualquier cosa. Yo supongo que uno podría
“explicar” el sol como billones de luciérnagas encerradas en una enorme esfera
de vidrio. Sin embargo, esta “explicación” no se corresponde tan bien con la
evidencia como la mejor teoría de que el sol es una enorme masa de hidrógeno
comprimido la cual está sometida a un proceso de fusión atómica.
Muchos testigos de OVNIS han dado explicaciones
prosaicas sólo por ignorar la evidencia que revela claramente que ellos no son
fenómenos terrestres. Si uno es suficientemente selectivo en la escogencia de
cuál evidencia y testimonio creer, uno puede inventar casi cualquier
explicación que encaje en casi cualquier testimonio de OVNIS. El truco es
encontrar la mejor explicación que encaje con la verdad y los hechos completos.
En muchos casos, la verdad y los hechos completos indican que un OVNI es mucho
mejor explicado como un fenómeno natural. En otros casos, la mejor explicación
es que un OVNI es probablemente una nave guiada inteligentemente de origen no
humano. Muchos testigos importantes encajan en esta última categoría.
3. No ha existido “evidencia dura” de
OVNIS o de “antiguos astronautas”.
Los objetos físicos constituyen la evidencia “dura”.
En Ovnilogía, una pieza de evidencia dura podría ser un “platillo chocado” o el
cuerpo de un piloto extraterrestre. Sostienen la opinión de que si la nave
espacial extranjera ha estado volando en los cielos de la Tierra por miles de
años entonces nosotros deberíamos tener un pedazo de evidencia física concreta
ahora. Poniendo los alegatos a un lado y la evidencia que algunos gobiernos
puedan tener un platillo chocado o dos inalcanzables secretos, nosotros
lógicamente no podemos esperar encontrar demasiados artefactos extraterrestres.
Para explicar el porqué, haré una analogía entre los OVNIS y los modernos
aviones jet comerciales.
Millones de vuelos de aerolíneas comerciales
despegan cada año de los aeropuertos de los Estados Unidos. A pesar de este
enorme volumen, muy poca gente se encontraría en un avión de aerolínea
destrozado o con el cadáver de un miembro de la tripulación, ya que un mínimo
porcentaje de la totalidad de los vuelos terminan en desastre. Igualmente,
pocos individuos alguna vez encontrarían instrumentos o restos desprendidos de
un jet de aerolínea, porque los jet de aerolíneas son compactos y los
navegantes rara vez sacan instrumentos de los paneles de vuelo y los lanzan por
la ventanilla de la cabina. Si no fuera por el hecho de que la mayoría de nosotros
puede ver un avión jet comercial y volar en ellos, la “evidencia dura” de su
existencia sería sorprendentemente escasa, especialmente si ellos fueran
manufacturados en, y volaran sólo para y desde áreas remotas.
Vamos a trasladar esto a una fórmula matemática.
Basado en las estadísticas de la FAA (US Federal
Aviation Administration), aproximadamente uno de cada un millón de vuelos de
transportes americanos mayores saliendo de los aeropuertos americanos sufre un
accidente serio, tal como una colisión, un accidente aterrizando en un
aeropuerto o una pérdida significativa de un pedazo de aeronave. Este record de
seguridad admirable hace del viaje aéreo uno de los más seguros medios de
transporte de hoy día.
Vamos a asumir que las naves extrañas reportadas en
nuestros cielos precisamente tienen el mismo record de seguridad como el jet
comercial americano, ni mejor ni peor. Vamos a suponer que se hacen 2000 vuelos
de “platillos voladores” todos los años sobre la Tierra. Resultan 5 ½ vuelos
diarios.
Asumimos que cada vuelo hipotético de platillos es
realizado a una altura suficientemente baja que si sucede cualquier accidente,
los restos caerían a la Tierra antes de desintegrarse en la atmósfera.
Poniendo todas las cifras anteriores juntas,
descubrimos que un “platillo volador” podría estrellarse, o dejar caer un
sustancial pedazo de resto, ¡sólo una vez cada cinco siglos! ¡Se podría contar
con sólo doce colisiones desde los albores de la primera civilización humana
registrada! Si acortamos el factor de seguridad a la mitad y doblamos el número
de vuelos OVNI hipotéticos a 4.000 por año (11 por día) o dejamos el mismo
factor de seguridad y cuadruplicamos el número de vuelos de platillos a baja
altura a 8.000 por año (22 por día), todavía resultaría la cantidad de un (1)
accidente o un pedazo mayor de restos una vez ¡por cada ciento veinticinco
(125) años!
Podemos concluir con seguridad que aunque las naves
extraterrestres hayan estado volando en nuestros cielos por milenios, no
podemos esperar encontrar muchos restos o desechos. La mejor evidencia de las
visitas extraterrestres que nosotros razonablemente podemos esperar obtener es
el testimonio de un testigo ocular, el cual es precisamente la evidencia que
nosotros tenemos.
A pesar de esas estadísticas pesimistas, se han
reportado unas pocos y raras colisiones de OVNIS. Fragmentos supuestamente
procedentes de explosiones de OVNIS han sido encontrados y se han hecho
públicos. Una de tales piezas fue reportada por un columnista brasilero quien
dijo que el artefacto había sido recogido por un pescador costa afuera de
Brasil en 1957. El fragmento fue enviado para su análisis por la revista Omni
al Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT). Se comprobó que era un
pedazo de magnesio puro. Un analista de MIT pronosticó que el fragmento pudo
haber sido un pedazo de metal fundido en la explosión de una nave o en la
reentrada a la atmósfera de un satélite. Debido a que los fragmentos podrían
haber sido manufacturados en la Tierra, la prueba fue considerada in
concluyente.
4. Si los OVNIS son naves
extraterrestres, ya debería existir la fotografía indiscutible de uno.
Todo puede ser discutido. Para comenzar una disputa,
todo lo que uno tiene que hacer es abrir la boca y emitir algunas palabras. Por
lo tanto, la mera existencia de una disputa, no niega en sí misma la realidad
de una cosa. La disputa simplemente significa que alguien ha decidido disputar
con buenas o malas razones.
No obstante, es verdad que los investigadores se
enfrentan con una pobreza de fotografías decentes tomadas a OVNIS. Las
instantáneas de OVNIS disponibles tienden a ser de dos tipos: la bastante
borrosa e in concluyente (podría ser la foto de cualquier cosa), o la
fraudulenta. Cuando surge una foto nítida y clara de un platillo volador,
comúnmente prueba ser falsa. Esto sucede tan a menudo que un investigador puede
hallar una “buena” fotografía de un platillo volador probando las “malas”. Esto
es específicamente verdadero hoy en día cuando los avances técnicos han hecho
algunas formas de trucos fotográficos casi indetectables.
Esto deja todavía la interrogante del por qué hay
disponibles tan pocas fotografías concluyentes.
Como se dijo antes, aparentemente las naves
extraterrestres genuinas se cuentan sólo en un pequeño porcentaje del número
total de OVNIS reportados. La mayoría de esas naves son vistas en la noche. El
mayor número de los “encuentros cercanos” (encuentros de humanos con ocupantes
de las naves) acontece en áreas rurales no recreacionales donde hay muy poca
gente que lleven cámaras consigo. En cualquier momento dado es seguro que menos
de una persona en diez mil porta una cámara fotográfica encima. Los OVNIS no compensan
esto haciendo apariciones programadas con regularidad sobre sitios vacacionales
concurridos donde habría mucha gente con cámaras instantáneas.
Debido a esos factores, podemos esperar que las
fotos buenas y genuinas de naves extraterrestres son artículos excesivamente
raros. Se recuerda también que los propietarios de cámaras se han expandido
sólo en un corto período de tiempo: varias décadas.
Con todo esto no se quiere decir que no existen
fotos claras de las que aparentemente son naves extrañas. Hay poco de ellas y
se pueden encontrar ilustrando varios de los libros escritos por responsables
investigadores de OVNIS.*
5. Las declaraciones de testigos
oculares en los casos de OVNIS son inherentemente inciertas (no dignas de
confianza). Por lo tanto, tales testimonios son evidencia insuficiente de
visitantes extraterrestres.
Quizás el crítico más influyente de los OVNIS como
de sus escritores es Philip Klass, quien ha sido acertadamente apodado el
“Sherlock Holmes de la Ovnilogía” por sus exhaustivas investigaciones. Su
libro, UFOS Explained, ganó el premio Aviation/Space Writers como el
mejor libro sobre el espacio en 1974. En el libro ganador del premio, Mr. Klass
desarrolló varios principios. El primero fue:
Principio Ovnilógico # 1. Básicamente
las personas honestas e inteligentes que son repentinamente expuestas a un
corto e inesperado acontecimiento, especialmente a uno que incluya un objeto no
familiar, pueden ser groseramente imprecisas al tratar de describir con
precisión lo que han visto.
Este principio es verdadero algunas veces. Fue
demostrado en un estudio, auspiciado por el Gobierno Norteamericano, realizado
entre 1966 y 1968 bajo la dirección de Edward U. Condon. Sus publicados
descubrimientos, comúnmente denominados “Condon Report”, son piedra fundamental
en la literatura OVNI. En un capítulo del “Condon Report”, el comité discute lo
que ocurrió después que una nave espacial rusa, la Sonda IV, se desactivó y
comenzó a entrar de nuevo en la atmósfera de la Tierra el 3 de Marzo de 1968. A
medida que la nave caía a través de la atmósfera y se quemaba, se creó una espectacular
imagen para la gente que observaba desde tierra. Los observadores percibieron
los restos encendidos como una procesión de objetos brillantes que dejaba
detrás una cola de color dorado naranja. Debido a la gran altura de los
objetos, fue imposible concluir desde tierra lo que eran realmente los objetos.
Sólo fue posible verlos como puntos de luz separados y brillantes. Los restos
del Sonda IV crearon un efecto idéntico al despliegue de un brillante meteoro.
En la compilación del testimonio de observadores del
reingreso del Sonda IV se descubrió que alguna gente “vio” más de lo que
realmente había. Si algunas de las observaciones erróneas hubiesen sido tomadas
por su valor real, alguna gente habría concluido que los restos del Sonda IV
eran realmente de alguna nave espacial visitante controlada inteligentemente.
Por ejemplo, cinco testigos oculares reportaron que la luz era parte de una
“forma de cigarro” o nave en forma de cohete: una descripción común de OVNIS.
Tres testigos oculares dijeron que el “objeto” había hecho un descenso
vertical. Debido a esos burdos errores, Mr. Klass y otros han denominado
comprensiblemente a todos los “OVNIS con forma de cigarro y con ventanas
brillantes”: meteoros. El Comité Condon cita el testimonio del Sonda IV como un
ejemplo de porqué los reportes de testigos oculares son con frecuencia
inadecuados para establecer que un OVNI es una nave extraterrestre.
¿Caso terminado?
Todavía no.
En su principio Ovni lógico citado arriba, Mr. Klass
establece que los testigos oculares pueden ser groseramente imprecisos tratando
de describir con precisión lo que han visto. Significativamente, él no dice que
los testigos oculares con comúnmente imprecisos. Esta distinción adquiere
importancia como leeremos más adelante en el “Reporte Condon”.
El Comité Condon descubrió que al menos la mitad de
los testigos oculares del Sonda IV fueron precisos, sin embellecer el reportaje
del acontecimiento. Las observaciones de “una nave en forma de cigarro con
ventanas” vinieron sólo de una minoría. De los reportes precisos, un
investigador de OVNIS cuidadoso podría ser capaz de eliminar las descripciones
erróneas e identificar correctamente al Sonda IV en su reingreso como restos o
un fenómeno meteórico. El Comité también analizó una ola de informes OVNIS
activados por varios estudiantes colegas quienes habían lanzado cuatro balones
de aire caliente a la atmósfera en la tarde. Los balones fueron hechos de
bolsas plásticas de lavandería; el aire caliente era generado por velas de
cumpleaños suspendidas en su interior. El Comité analizó el testimonio de
catorce testigos quienes no sabían lo que eran los objetos voladores. Con
alguna desviación menor entre ellos todos los catorce observadores dieron
descripciones precisas de lo que era posible para ellos de lo que realmente
vieron. El Comité concluyó:
“En resumen, nosotros tenemos un número
de reportes que son altamente consistentes uno con otro, y aquellas diferencias
que ocurren no son tan grandes de lo que se esperaba de diferencias perceptivas
y situacionales. Muchas pequeñas discrepancias fueron puntualizadas,
especialmente con respecto a estimados de distancia y dirección, pero estas no
fueron lo suficientemente grandes como para afectar la total impresión del
acontecimiento.”
Esto
demuestra algo muy importante que nosotros expresamos en nuestro propio “Principio
Ovni lógico”:
Las personas básicamente honestas e
inteligentes que han estado expuestas repentinamente a un acontecimiento breve
e inesperado, incluyendo uno que envuelve a un objeto no familiar, pueden, en
la mayoría de los casos, ser precisas tratando de describir con precisión lo
que han visto.
Este es el porqué, el testimonio de testigos
oculares puede ser admitido en las cortes de justicia para condenar o liberar
un defendido aun cuando se carece de evidencia física sólida. El testimonio de
un testigo visual es perfectamente válido y es una forma útil de evidencia.
6. Sofisticados aparatos de escucha han
sido apuntados hacia el cielo para recoger comunicaciones extraterrestres. Desde
entonces, no ha sido detectada ninguna. Esto es suficiente evidencia de que no
hay vida inteligente en las cercanías.
A pesar del escepticismo en muchos círculos
académicos con respecto a las visitas de extraterrestre, se han hecho varios
intentos bien fundados para detectar señales de otras civilizaciones del
espacio, mediante el uso de sofisticadas radio–antenas apuntando hacia los
cielos. El hecho de que esos esfuerzos no hayan reportado alguna señal
inteligente es visto como una prueba adicional de que no existen civilizaciones
extrañas en la cercanía.
El problema con diseñar una conclusión así es que
las radio–antenas tienen muchas limitaciones. Ellas solo son capaces de
detectar ondas de radio. Hay muchas otras bandas dentro del espectro electromagnético*
que pueden portar señales de comunicación, tales como las micro-ondas.
Además, una sociedad extraterrestre, si existe, ¿necesariamente tendría que
usar ondas de radio para comunicarse? Todavía nosotros desconocemos lo que hay
más allá de los dos extremos conocidos del espectro electromagnético. ¿Cómo
podemos asegurar que no hay longitudes
de onda en una de las dos regiones no mapeadas, las cuales están lejos por
encima para la comunicación con algo que hemos detectado tan lejos? La falla
imputada a las radio–antenas para registrar señales inteligentes podría
hablarnos sólo de que ninguna dentro del rango, está usando longitudes de ondas
electromagnéticas detectables por esas antenas.
7. Si tantos “platillos voladores” están
visitando la Tierra, ¿por qué no son detectados más a menudo por el radar?
Muchas observaciones notables de OVNIS han sido
confirmadas por el radar. Esta excelente evidencia del radar es generalmente
desestimada por los críticos como un error del operador, mal funcionamiento del
radar o falsas lecturas causadas por fenómenos naturales. Podríamos obtener
muchas más evidencias de radar si no fuera por el hecho de que los operadores
de radar son entrenados para no tomar en cuenta la mayoría de las anomalías del
radar porque cualquier cosa puede causar falsas lecturas. Señales espurias de
radar pueden generarse por tal cantidad de fenómenos dispares como bandadas de
pájaros y severas condiciones del tiempo. Los operadores están entrenados para
enfocar aquellas lecturas que apuntan al tipo de objetos que son rastreados
como sucede normalmente con las naves humanas. Si algo anormal aparece en la
pantalla y es el rango de longitud de onda en el cual pueden viajar diferentes
formas de luz. En uno de los extremos del espectro conocido están las ondas de
radio, las cuales son de longitud de onda largas. (Si las ondas de radio son
realmente ondas largas, ellas se convierten en “sonido” cuando son traducidas por
un receptor). En el otro extremo del espectro están los rayos gamma los
cuales son de longitud de ondas cortas. El rango de la luz que vemos con
nuestros ojos está limitado a una banda muy pequeña del espectro. Se han
inventado instrumentos para captar y transmitir en otras longitudes de ondas,
tales como el infrarrojo, los rayos X y la micro–onda.
La detección de OVNIS por el radar está siendo
eliminada por los avances de la tecnología. Muchas de las computadoras modernas
de radar, ahora eliminan las lecturas anómalas de tan forma que no sean
señaladas en la pantalla del radar.
Esto hace más fácil el trabajo del operador, pero al
costo de eliminar la detección de OVNIS. Mr. Klass comenta:
“Irónicamente, uno de los varios criterios usados
por la computadora del radar para discriminar entre los blancos reales y los
espurios, filtraría y sacaría los OVNIS potenciales del radar aun si ellos
fueran legítimas naves extraterrestres volando a velocidades hipersónicas….”
8. Mucha gente ha testificado bajo
hipnosis que han sido raptados por OVNIS. Tal testimonio es inherentemente
sospechoso porque la gente que nunca ha sido raptada puede ser llevada a crear “memoria”
simulada de raptos reales mientras está bajo hipnosis.
Si el fenómeno OVNI consistiera solamente de raras
visiones ocasionales en el cielo, podría ser fácil desestimarlo. Sin embargo,
mucha gente ha reportado haber sido secuestrada por ocupantes de OVNIS. Las
experiencias de rapto tienden a ser notablemente similares: la víctima ve un
OVNI, casi siempre en la noche y frecuentemente en áreas rurales; es
inmovilizada y llevada a bordo de una nave extraña; allí se le practica un
examen físico por criaturas extrañas durante una o dos horas; luego es
liberada. Muchos de los secuestrados no recuerda conscientemente sus
experiencias después. Una víctima típica puede ver solamente a un OVNI y luego
repentinamente descubre que ha pasado dos horas con ninguna recolección de lo
que ha ocurrido durante esta laguna en el tiempo.
Los investigadores generalmente pasan a través de
esta amnesia con hipnosis. Parece que la curiosa amnesia experimentada por
muchos de los raptados por OVNIS es deliberadamente inducida por los ocupantes
del OVNI como un método de preservar el anonimato de los visitantes. Tal
taponamiento mental por supuesto que puede hacerse. Durante sus infames y
altamente publicitados experimentos de “control de la mente” de los años 1960 y
los 70, la CIA norteamericana desarrolló técnicas efectivas para enterrar la
memoria e inducir amnesia. Con un trabajo cuidadoso, sin embargo, la memoria
enterrada podría recuperarse. Como veremos más adelante, el taponamiento mental
con víctimas humanas ha sido una actividad común asociada con los OVNIS a lo
largo de toda la historia.
Para la fecha, un enorme cuerpo de testimonios
fascinantes se han reunido.
Han sido lanzadas difamaciones sobre estos, debido a
varios experimento tales
como: los conducidos en 1977 por el Anaheim Hospital
de California. Se descubrió en Anaheim que aquellos individuos que alegaban
tener poco conocimiento previo de OVNIS podían ser preparados para crear
“memorias” de raptos similarmente realistas
acerca de secuestros OVNIS mientras estaban hipnotizados. Este descubrimiento
ha sido usado para propagar dudas sobre la validez de todos los testimonios de
secuestros obtenidos bajo hipnosis.
Es verdad que la memoria de una persona puede ser
distorsionada mientras está bajo hipnosis para que aparezca como memoria de una
persona completamente consciente. Por otro lado, ha sido ampliamente demostrado
que la hipnosis para ser efectiva en la recuperación de la memoria
completamente válida, depende de las habilidades del hipnotista y del estado
mental del sujeto.
Un hipnotista puede preparar a una persona que nunca
ha subido a bordo de un tren creándole una “memoria” realista de estar montado
en un tren, pero: ¿significa esto que cada sujeto hipnótico que recuerde haber
estado en un tren es culpable de su prefabricación? Claro que no.
Se admite que existen problemas genuinos con la
hipnosis. Debido a que el sujeto hipnótico está en un estado
medio–inconsciente, él o ella puede ser más impresionable de lo normal. Por
esta razón, las cortes legales americanas generalmente no admiten dentro de las
evidencias el testimonio obtenido mediante hipnosis. Otro peligro con la
hipnosis es que un sujeto puede recuperar una memoria completamente válida,
pero si al sujeto se le está continuamente presionando para que recuerde más
durante la hipnosis, puede que encuentre su “línea temporal” hecha un
revoltijo. Cuando sucede esto, lo frecuente es que comience a “recordar
episodios” adicionales que realmente no ocurrieron cuando o como son
recordados. Es más, la memoria original permanece válida.
Tristemente, algunos secuestrados por OVNIS han sido
hipnotizados y rehipnotizados más allá de toda medida razonable.
Consecuentemente, se enrollan con una memoria revuelta en el ya altamente
cargado incidente de su secuestro.
Por esta y otras razones, yo no recomiendo
seriamente el uso de la hipnosis. Una memoria fuertemente ocluida debe ser
recuperada mientras un sujeto está totalmente en estado consciente. Algunas
experiencias de secuestros de OVNIS han sido recuperadas precisamente de esta
forma.
9. Las probabilidades matemáticas de una
raza extraterrestre descubriendo la Tierra son bastante remotas como para que
sea posible.
Han sido instrumentadas varias fórmulas matemáticas
para señalar cómo es improbable que la Tierra haya sido visitada por una
sociedad extraterrestre. Tales fórmulas están basadas en teorías de la
evolución, el número de planetas que pueden soportar vida y las distancias
entre planetas y galaxias.
Tales fórmulas son verdaderamente interesantes pero
no pueden nunca ser consideradas concluyentes. Si algo existe, existe. Tratar
de sacar esto con una fórmula matemática no lo hará menos real.
Manteniendo en mente que somos incapaces de ver cualquier
planeta sólido más allá de nuestro sistema solar, cómo vamos a determinar si
hay alguna vida en ellos. La situación humana a este respecto puede ser
comparada con una colonia de hormigas enanas cuyo campo de observación puede
que cubra sólo unas pocas hectáreas. Si esta colonia está situada en un
desierto estéril, las hormigas pueden llegar a la conclusión que la totalidad
de la Tierra es un desolado terreno; ni soñar con la vasta metrópoli que está
situada a unas cien millas de allí. Simplemente porque nosotros hallamos
nuestro propio sistema solar o sector de la galaxia estéril, no automática y
necesariamente este sea el caso para otras partes. Otro sector de la galaxia
puede ser absolutamente abundante en vida inteligente y aquí no habría manera
de conocerla desde este distante borde de la Vía Láctea, excepto por los
pronósticos de teorías que siempre están cambiando. Por esta razón es
particularmente recomendable no despreciar las evidencias de las visitas de
extraterrestres si aparecen.
10.Sólo la gente con problemas mentales
cree en los OVNIS.
Uno de los métodos desafortunados que algunos
críticos OVNI usan para atacar la evidencia de visitantes extraterrestres es
con la teoría psicológica.
Debido a que una crítica así es totalmente segura de
que no ha habido ninguna nave extraterrestre en nuestro cielo, él puede
recurrir al uso de etiquetas psicológicas difamatorias en un esfuerzo por
“explicar” por qué mucha gente considera una posibilidad que los críticos
rechazan. Tales críticos recorren una gama desde la simple necesidad de
realización religiosa hasta una esquizofrenia.
Esta sospechosa psiquiatría se ha puesto de moda
desgraciadamente en los años recientes. Esto esconde la realidad de que muchas
investigaciones serias de OVNIS son tanto clínicas como científicas, como uno
podría esperarlo. La mayoría de los investigadores OVNIS son tan sanos y
racionales como aquellos críticos que son tan rápidos para unirse con las
etiquetas psicológicas halagüeñas. El verdadero debate OVNI se centra en la cuestión
genuinamente científica, intelectual e histórica, no emocional.
Otro problema con el uso del ”análisis” psicológico
para “explicar” el interés científico y popular en los OVNIS es que se le puede
voltear la tortilla. Un escolar evocando la posibilidad de visitas
extraterrestres puede tan fácilmente como incorrectamente argumentar que
aquella gente que se adhiere sólo a explicaciones prosaicas por las
observaciones de OVNIS, enfrentándose a evidencias contrarias, están temiendo
profundamente algo que ellos no pueden entender. Entre las distinguidas
patillas de un PhD uno podría argumentar que puede ser un chico atemorizado o
un adolescente eufórico desesperadamente tratando de manejar el mundo
frecuentemente confuso a su alrededor, forzando todas las cosas para
conformarse a lo que puede comprender intelectual y emocionalmente.
Como podemos ver, la difamación psicológica es una
forma muy pobre en un debate científico de esta clase. Esto no hace ningún
bien. Las etiquetas son comúnmente inciertas y oscurecen el real propósito. La
gente racional e inteligente se encuentra fácilmente en todos los lados de la
controversia OVNI.
11. Las teorías sobre OVNIS, diseñadas
como trampas para cazar incautos, son fraudes para hacer dinero.
Hay una verdad la cual dice que hay dos grandes
crímenes en nuestra sociedad: tener dinero y no tener dinero. Ambos son penados
con igual ferocidad.
Una de las formas más fácil que existe para
desprestigiar una idea es sugerir que alguien ha recibido dinero por
expresarla. Algunos de los críticos OVNIS hacen alusión a los charlatanes que
en el pasado habían engañado a la gente con ideas extrañas y de esta forma se
hicieron ricos basándose en la ingenuidad de la gente. Tales alusiones se hacen
en un esfuerzo por sugerir que la gente que gana dinero con los libros o
películas sobre el movimiento OVNI se han mezclado en tales chanchullos.
Por favor, recuerde que el dinero en sí mismo no
tiene nada que hacer con la validez de una idea. El dinero es una comodidad
imprescindible que va igualmente a quien lo merece o lo desmerece. El manejo de
gentes, por supuesto que ha producido buenos ingresos por los libros y
películas que tratan con el fenómeno OVNIS. Sin embargo, el número de personas
que han hecho eso es muy pequeño comparado con los miles de profesores,
conferencistas y escritores que son pagados, algunas veces con buena
generosidad, para promulgar visiones más convencionales del mundo.
Aun cuando está claro que unos pocos individuos han
discutido hipócritamente e informado falsamente sobre OVNIS con el sólo
propósito de hacer dinero, el fenómeno OVNI no está automáticamente
desacreditado. Hacer beneficio ha sido uno de los motivos del esfuerzo que el
hombre ha realizado en casi todas sus luchas desde los días más antiguos de la
humanidad. Si fuéramos a rechazar todo aquello por el cual alguien ha hecho
sólo por el motivo de obtener un beneficio, poco quedaría de nuestra cultura.
Afortunadamente, la vasta mayoría de testigos oculares OVNIS junto con investigadores,
ricos y pobres, son sinceros en lo que dicen y hacen.
12.El comportamiento de los OVNIS no se
conforma a lo que nosotros pensamos que debería ser el comportamiento de una inteligencia
extraterrestre.
Los OVNIS son difíciles de estudiar debido a su
naturaleza extraña e impredecible. Por un lado, el comportamiento OVNI parece
plantear algunas de las más profundas interrogantes acerca de la vida y la
existencia, mientras por otro lado, parece ser el material de una película de
Buck Rogers. Esta dualidad es difícil de conciliar, ya que es una parte
ineludible del fenómeno. Como veremos, el OVNI es ambos, superficial y
profundo.
Este factor a menudo es usado para desacreditar los
informes OVNIS.
Algunos críticos inquieren que si los OVNIS son naves
extraterrestres como tales deberían manifestarse de una manera más aceptable.
Porqué, por ejemplo, OVNIS han aparentemente raptado amas de casa e implantado
en ellas mensajes religiosos, pero nunca han aterrizado en los jardines de la
Casa Blanca y hablado con el Presidente de los Estados Unidos.
En uno de sus libros, Philip Klass ofrece una
recompensa de 10.000 dólares por una prueba concluyente de una visita
extraterrestre. Para calificar por la recompensa sólo bastaría con presentar
una nave siniestrada u otra evidencia que la Academia de Ciencias de los
Estados Unidos anuncie ser una afirmación de inteligencia extraterrestre o un
visitante extraterrestre debe aparecer ante la Asamblea General de las Naciones
Unidas o en un programa de televisión a escala nacional. El hecho de que nadie
haya recibido la recompensa es visto por alguna gente como una prueba adicional
de que la Tierra no ha sido visitada por una sociedad extraterrestre.
El problema con la recompensa de 10.000$ es obvio
inmediatamente. Hemos discutido ya la escasa posibilidad de encontrar un
“platillo” siniestrado o un pedazo grande de los restos. ¿Qué, si la Academia
Nacional de Ciencias es propensa a argumentar un origen terrestre de una
pequeña pieza de evidencia dura, antes que admitir una prueba no terrestre?
¿Qué, si los pilotos extraterrestres no están inclinados a aparecer en la
televisión o en la Asamblea General de las Naciones Unidas, del mismo modo que
un piloto humano no está dispuesto a dirigirse a un consejo de chimpancés?*
Todos nosotros verdaderamente podemos desear que los
OVNIS deberían ser más cooperativos, pero lo visto hasta ahora indico que el
fenómeno OVNI debe estudiarse en sus propios términos y no de acuerdo al
comportamiento que nosotros pensamos deberían exhibir ellos.
13. En el pasado, unos pocos OVNIS
observados trataron de venderse como prueba de visitantes extraterrestres pero
el tope de investigadores OVNI probó que eran fenómenos terrestres o engaños.
Tales errores ponen en duda todas las declaraciones de los investigadores OVNI.
Debido a que el fenómeno OVNI es tan difícil de
estudiar, aún los mejores investigadores inevitablemente cometerán errores,
algunas veces muchos de ellos. Es fácil para alguien apropiarse de esos errores
y usarlos para desacreditar la totalidad de la materia. Esta táctica es usada
con frecuencia por los abogados en las cortes judiciales, por los hombres de
estado durante los debates políticos y hasta por científicos metidos en
controversias académicas.
El problema con estas tácticas es que no siempre
conduce a la verdad; es más, puede alejarse de ella. Un buen ejemplo fue la
“Teoría de la Redondez de la Tierra” expuesta por Cristóbal Colón en siglo XV.
En una época cuando mucha gente todavía creía que el mundo era plano, Colón
formaba parte de un movimiento que proclamaba que la Tierra era redonda o en
forma de una pera.
Tan correcto como era Colón en esta cuestión, estaba
equivocado en muchas otras. Colón pensaba que podría encontrar Asia cuando
cruzara el océano Atlántico y declaró falsamente que había dado con ella cuando
regresó a España.
Hoy sabemos con claridad que Colón no había
encontrado Asia en absoluto. Él se había tropezado con el continente de la hoy
Norteamérica el cual no está ni remotamente cerca de Asia. Debido a esto
fácilmente podríamos burlarnos de la evidencia falsa de Colón y proclamar que
su Teoría de la Redondez de la Tierra también es falsa. Después de todo, otras
ideas de Colón acerca de la Tierra estaban claramente equivocadas; algunas
absurdamente.
Este tipo de situación ocurre con frecuencia,
especialmente cuando la ciencia es nueva como lo es hoy la Ovnilogía.
Declaraciones falsas y evidencias erróneas usualmente se utilizan para apoyar
fundamentalmente ideas sonoras. Esto no significa que cada teoría nueva que se
pone de moda es válida o que mala evidencia es el símbolo de una nueva teoría.
Muchas teorías nuevas prueban mal.
El truco es sopesar todas las evidencias y basar la
decisión sobre estas. Sin embargo, haciéndolo así no se sorprendan al encontrar
el desacuerdo de otros ya que es cosa extraordinaria que dos personas puedan
mirar una información idéntica y llegar a conclusiones opuestas.
14.Las teorías que expresan visitas de
extraterrestres y de “antiguos astronautas” es peligrosa para la sociedad.
Este argumento no es muy dignificante en las
sociedades con tradición de debates y discusiones abiertas. La libertad de
expresión es una de las piedras fundamentales de una cultura sana. Permite a
una sociedad y a un pueblo, crear. Una amplia diversidad de ideas da a la gente
más perspectivas para escoger. Poseer tal capacidad de elección es preferible a
tener opciones intelectuales restringidas. En una sociedad abierta, muchas
ideas no convencionales vienen y van pero este es un precio muy pequeño a pagar
por el enorme beneficio de mantener las líneas de comunicación abiertas y
libres.
15. Si hay tantos OVNIS, ¿por qué yo
nunca he visto uno?
Yo tampoco nunca he visto un OVNI. Yo tampoco nunca
he visto la India, pero la evidencia circunstancial de su existencia tiende a
hacerme pensar que la India probablemente existe.
En adición al argumento anterior, se ha usado otros
medios para desacreditar las observaciones OVNIS. Uno de los métodos utiliza la
semántica. Algunos críticos de los OVNIS dicen que ellos tratan de encontrar
explicaciones “racionales” para los testimonios visuales de OVNIS. Por
“racional” ellos quieren decir, explicaciones que retraten un testimonio como
un objeto natural o uno realizado por el hombre. Este es un uso desafortunado
de la palabra “racional”. La palabra “racional” significa “sano”, bien pensado”
o “lógico”. Debido a que lo lógico y sano debe estar basado finalmente en una
explicación “racional” de un fenómeno, debería ser aquella explicación que más
cercanamente se aproxime a la verdad, no importa lo que pueda ser la verdad. Si
un OVNI reportado resulta ser un fenómeno natural mal percibido, explicar esto
tal cual, sería por supuesto lo racional. Por otra parte, si un OVNI resulta no
ser un fenómeno natural ni un artefacto construido por el hombre, decir que se
está frente a una evidencia
contraria a lo que es, no sería racional en
absoluto.
Habiendo expresado todo esto, todavía yo entiendo la
repugnancia de mucha gente para tomar en serio el fenómeno OVNI. Es materia
difícil para atrapar a un ingenuo. Algunos individuos que alguna vez fueron de
mente abierta con respecto a los OVNIS, han tenido experiencias desagradables
al recibir huevos estrellados contra su rostro cuando sobre-especulaban acerca
de los OVNIS y se probó que estaban equivocados. Un ejemplo fue la debacle
pública que rodeó la luna marciana Fobos. Cerca de diez años atrás un número de
líderes científicos de opinión, habían especulado que Fobos era un satélite
artificial colocado en órbita alrededor de Marte por extraterrestres. Más
tarde, cuando un artefacto espacial voló suficientemente cerca para fotografiar
a Fobos, la pequeña luna marciana resultó ser un gran pedazo irregular de roca,
aunque algunas de sus características orbitales permanezcan desconocidas.
Científicos y astrónomos, debido a que ellos sobreviven a su buena reputación,
no pueden soportar demasiado disparate especulativo de esta clase. Mucha gente
que sufre una caída de esta clase, no se vuelve a montar en el caballo, por el
contrario ellos maldicen y atacan a la bestia que los tiró. Investigadores
competentes están conscientes hoy de esos peligros y tratan de evitar especular
más allá de los hechos conocidos.
¿Por qué tomo seriamente la posibilidad de visitas
extraterrestres, pensando aún que estoy de acuerdo con la explicación “natural”
para algunos testimonios oculares OVNIS todavía debatidos hoy en día? Yo hago
esto por muchas razones.
Primero, el fenómeno OVNI ha sido observado y
reportado por centurias. De tal manera que yo rechazo la crítica que sostiene
que los OVNIS son meramente un fragmento del folklore moderno. Segundo, el
fenómeno OVNI ha sido sorpresivamente consistente de localización en
localización y de era en era. Por ejemplo, algunas observaciones modernas de
OVNIS con figura de cohete o de cigarro son el reflejo de un OVNI reportado en
el siglo XV en Arabia. Tercero, aunque es cierto que alguna evidencia dudosa de
“antiguos astronautas” ha sido publicada, esto tiene verdaderamente alguna
evidencia destacada. El desafío de los críticos de que “un reclamo
extraordinario requiere de una prueba extraordinaria”, para mí, ha sido reunida
por alguna de estas evidencias. Cuarto, la teoría de los “antiguos astronautas
“difícilmente es el “no-sentido seudocientífico” de que ha sido acusada de ser.
La teoría de los “antiguos astronautas” es una hipótesis sorpresivamente lógica
para esparcir luz a datos históricos previamente inexplicables. Espero que esta
será algún día reconocida como una verdad incontrovertible aunque encuentre
considerable oposición hoy en día. El hecho de que la teoría surja de
investigación de gente sin renombre y no de los salones de marfil de una gran
universidad, significa poco. Cualquiera con una mente curiosa y activa puede
hacer descubrimientos significativos.