👉 DE LA EXCELENCIA EN LA EDUCACIÓN Y CUANDO EL FRACASO DEL ESTUDIANTE ES EL FRACASO ROTUNDO DEL MAESTRO Y DE LA SOCIEDAD DONDE VIVE.
Estos días he estado organizando fotos y recuerdos de mi niñez, por eso hoy, quiero compartirles una historia muy personal sobre mi trayectoria escolar.
Les diré que me costó un poco de trabajo adaptarme al colegio. Los primeros días, lloraba mucho, y me agarraba a la cerca para que mi madre no se fuera. Incluso, le llegué a dar patadas a una profesora, como una potranca salvaje (creo que ella me odiaba).
Entonces, un buen día, llegó una profesora que cambió el rumbo de mi vida escolar: Blanca Teresa Rodríguez. Ella pidió que me trasladaran a su aula. Los primeros días bajo su enseñanza, no recibí clases, mientras mis compañeros estaban en el aula, yo paseaba por toda la escuela cobrando el sindicato a los profesores y les entregaba mensajes, hasta que me fui, poco a poco, adaptando al ámbito escolar.
Con el tiempo, fui monitora de varias asignaturas y, en ausencia de la profesora, impartía clases a mis compañeros. También, a raíz de las elecciones estudiantiles, ocupé varios cargos: Jefa de Destacamento de primero a cuarto grado; Jefa de Emulación del Colectivo en quinto grado y Jefa de Escuela (o Jefa de Colectivo) en sexto grado. Para satisfacción de mis padres, fui el 1er Expediente durante toda mi etapa primaria.
Con esto quiero decirles, que de no ser por aquella profesora que siempre llevaré en mi corazón, tal vez mi trayectoria como estudiante hubiera sido completamente diferente. A veces, existen esos puntos de encuentro en nuestras vidas, que pueden torcer el rumbo de nuestro destino para siempre. Gracias a aquella maestra amé estudiar, amé el conocimiento, y hoy guardo los mejores recuerdos de aquella época.
Martha Jacqueline Iglesias Herrera
Memorias 🌹🇨🇺
