ORESTES GIRBAU COLLADO: “El estudio OVNI es demasiado abarcador y toca las almas de quienes lo investigamos”.

Por Martha Jacqueline Iglesias Herrera

Para la tercera entrevista de este 2019, he tenido el placer de invitar en Código Betelgeuse a un querido compatriota. Hablo del reconocido ufólogo cubano: Orestes Girbau Collado, quien es actualmente Responsable de Relaciones Públicas e Investigaciones del Comité Gestor de la Asociación Cubana de Ufología (ACU).

Le damos la Bienvenida en nuestro espacio y espero que esta entrevista resulte de gran interés para nuestros lectores. 

JK: Orestes, tengo entendido que su trayectoria ufológica comienza apenas siendo un niño. Podría decirnos: ¿cuáles fueron las primeras señales que marcaron su rumbo en este camino y cómo las mismas influyeron en su posterior desarrollo como ufólogo?

OG: Gracias, primero que todo, por dedicarme espacio en su excelente blog.

Siendo un niño de 6 años mi abuela me entretenía con sus lindos comentarios y una tarde, como por arte de magia, pasaron volando unas aves en formación de V. Mi abuela que era corresponsal de prensa entonces hizo una analogía entre la formación y los platillos volantes, artefactos presumiblemente marcianos, que nos estaban visitando desde hacía unos años. La coincidencia en aquellos momentos con la gran oposición del planeta Marte-1956, el devenir investigativo en torno a ese enigmático mundo, por parte de los astrónomos en tan memorable año, sedujeron mi imaginación para siempre.

Luego, mi tránsito hacia la Ciudad de Matanzas -1963- y los acontecimientos OVNI de 1965 en la Antártida, Francia y otras latitudes, fueron conformando mi grado de conciencia respecto a la fenomenología. También el hecho de que figuras del ámbito científico e intelectual, mostraban su interés y dedicación a un misterio que, lejos de carecer de perspectiva, tiene características muy peculiares que lo hacen expandirse.

Desde entonces, y siendo un joven estudiante de pre universitario, me consagré en cuerpo y alma a la investigación y divulgación del tema, que cada vez era y continúa siendo más interesante e impredecible, sobre todo la importancia que el mismo representa para la especie humana, histórica y tecnológicamente hablando. La experiencia vivida con anterioridad, en septiembre de 1957, cuando observé un objeto cilíndrico moviéndose del NE al SW, alto sobre mi casa, en el pueblo de Falla, perteneciente a la provincia ciegoavileña, me impresionó de sobre manera, tenía sólo 7 años de edad. En Matanzas, y luego en Ciudad Habana, me uní a otras personas con iguales inquietudes, algunas de ellas mayores que yo en años y experiencia, como el periodista habanero Oscar Hurtado, a quién mucho le debo en mi formación ufológica, y que decenios después lo nombraríamos pos morten, el Primer Ufólogo Cubano, aunque posee a la vez el bien merecido crédito, por su aval, de ser reconocido como el Padre de la Ciencia Ficción Cubana.

Después, la temporada en los grupos de Astronomía, la coordinación de conferencias temáticas, nuevas experiencias de avistamientos presenciadas por mí, y la llegada del año 1989 con una cierta apertura en los medios, marcada por la presencia, nuevamente en nuestro archipiélago, de los OVNIs. La relación con otros investigadores, ahora extranjeros, hasta un nuevo caudal de lecturas novedosas que denunciaban la presencia alienígena a nivel planetario, la fundación del Círculo Albert Einstein en Matanzas, y la voluntad de llevar adelante un sendero objetivo de estudios relativos al Caso Ovni, con su consiguiente etapa en cuanto a investigaciones de campo, nos lleva a fundar el -PIFAAM- Proyecto para la Investigación de Fenómenos Aéreos Anómalos en Matanzas.

JK: El 21 de abril de 1997 fue fundado el Proyecto de Investigación de Fenómenos Aéreos Anómalos en Matanzas (PIFAAM), del cual fue su presidente fundador hasta el 2003. ¿Podría hablarnos de la línea de trabajo seguida y la proyección internacional del mismo?

OG: Llevamos a cabo entonces en nuestro accionar tres derroteros fundamentales: uno de ellos, recepcionar evidencia OVNI de Encuentros Cercanos de todos los Tipos, haciendo énfasis en el rigor objetivo de cada uno, desechando todo aquello que presumiera charada, fotos no convincentes, testimonios poco creíbles y/o demostrables, y videos trucados. Por otra parte, dedicamos mayor tiempo a la investigación de campo, que veníamos realizando desde 1984 un grupo menor de fundadores del Proyecto.

Otro de los asuntos prioritarios era, que tratamos de unificar a los grupos disgregados, que de una u otra manera ya existían o estaban próximos a conformarse. También, por primera vez, buscamos compenetrarnos con colegas, agrupaciones, instituciones y personalidades comprometidas con la verdad, dentro de sus respectivos medios investigativos, en torno a la casuística que nos ocupa. Aprender más y entender mejor sobre UFOs era y sigue siendo nuestro propósito, y quienes mejor que nuestros pares en el exterior, y, en primer lugar, los latinoamericanos.

Y un tercer aspecto es el relativo a hurgar la historia del enigma, a través de la arqueología, el arte rupestre, la mitología, religión, parapsicología y literatura antigua.

El análisis de videos y películas documentales del siglo XX ha sido tratado con resultados obviamente positivos. En poco tiempo ufólogos de Argentina, Brasil, Ecuador, Estados Unidos, España, Italia, Chile y Canadá, por sólo citar unos cuantos ejemplos, fueron configurando toda una pléyade de relación solidaria, vital para nuestra consolidación y en cuanto a Relaciones Públicas, tanto humana como ufológica, ya que dio mayor carácter e identidad propia, a la función que ejercíamos dentro del marco científico-cultural y social.

JK: ¿Existieron dificultades para la fundación el 14 de noviembre de 1998 del Comité Gestor Nacional OVNI de la Asociación Cubana de Ufología? Una vez fundado, ¿cómo considera su posterior desarrollo?

OG: Para fundar el Comité Gestor no hubo mayores dificultades. Ya teníamos de antemano hecho los contactos con el grupo de Cienfuegos y los dos existentes en Ciudad Habana y el de Sancti Spíritus, al que posteriormente se sumaría otro gestado en lo que es hoy Artemisa; con el tiempo se conformaría uno más con iguales propósitos en Las Tunas. En la ciudad de Colón, Matanzas, fue fundado un nuevo grupo presidido por Luis Vega, un joven entusiasta y colaborador. Nuestro Comité fue fundado en el salón de actos de la Sociedad Cubana de Meteorológica, donde varios especialistas de cuatro provincias apoyaron la idea, relacionada con la creación de una Asociación Cubana de Ufología. En la Directiva del Comité hay tres miembros, un científico y dos especialistas - entre los que me cuento- que laboran o han laborado hasta reciente en instituciones del CITMA -Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente-. El Presidente fundador entonces hasta el verano de 2003, lo fue el físico Enrique Pérez. Desde el 2003 y hasta el 2013 fue presidido por mí, y a partir de ese último año hasta el presente, el Comité lo lleva presidiendo el Licenciado Patricio Bosch, políglota y especialista de la Biblioteca Nacional José Martí.

En cuanto a su posterior desarrollo puedo decirle con toda transparencia, que, en los 20 años de creado el Comité, hemos realizado un programa vasto de investigaciones, análisis, evaluaciones y divulgación del Caso OVNI en nuestro entorno, que resulta mayor a las perspectivas que habíamos sugerido, participando en conferencias, video debates, talleres, exposiciones, incluso en algunas ocasiones con la presencia de invitados del Brasil, Canadá y Australia. 

Hemos tenido a nuestra disposición espacios virtuales en los que, en alguna medida, nos hacíamos conocer mediante trabajos multidisciplinarios; la realización de Documentales temáticos, uno de ellos titulado OVNIs: ¿en Cuba? de los directores y ufólogos Octavio Cortázar y Hugo Parrado.

La invitación que nos hicieron en marzo del 2013 al Congreso Ufológico de San Marino por el directivo del CUN Centro Ufológico Nacional de Italia, fue un enorme estímulo para el Comité Gestor de la ACU por su trascendencia. 

Publicaciones como la Revista Signos de Villa Clara, y obras de autores cubanos no se hicieron esperar durante el período antes mencionado, así también entrevistas como la que concedí a la amiga y colega argentina Débora Goldstern para su importante espacio "Crónica Subterránea". La participación nuestra en programas radiales en distintas provincias y el programa "Pasaje a lo Desconocido”, han proporcionado un cuadro consecuente del quehacer cotidiano y la experiencia del colectivo a nivel nacional. En noviembre de 1998 éramos apenas unas 100 personas vinculadas de una u otra forma al fenómeno OVNI en nuestro territorio nacional, hoy pasamos sin dudarlo de 250. Debo añadir con toda justeza, lo que significó la creación, por los colegas Carlos Heredero y Carlos A. García del sitio web Ovnis Cuba y el apoyo brindado por el ufólogo cubano -ya fallecido- Virgilio Sánchez Ocejo, quién dirigiera magistralmente por muchos decenios el Miami UFO Center.

Es justo transmitir lo significativo que ha sido para nuestro colectivo, el haber sido invitado a pertenecer a la destacada Lista Latinoamericana "PLANETA UFO" que dirige el nuestro amigo y colega Guillermo Giménez en la República de Argentina.

JK: ¿La Asociación Cubana de Ufología ocupa actualmente un estatus legal en nuestro país?

OG: No. Y disculpe que mi respuesta sea en extremo socrática y tajante.

JK: Háblenos de su experiencia como colaborador en el Portal de la Asociación Forteana Latinoamericana, en Argentina.

OG: Fue un período extraordinario y formidable, siete años en que tuvimos la oportunidad, no pocos investigadores cubanos, de expresar las experiencias pasadas y hasta ese momento sobre la realidad UFO en el entorno criollo. Gracias a esa alternativa novedosa, a la que fuimos invitados cordialmente por el investigador argentino Fabio Picasso, tuvimos la suerte de compenetrarnos con una mayor cantidad de ufólogos latinoamericanos, muy experimentados y de mucha cultura. Considero que por aquellos años 2007-2014 Asociación Forteana Latinoamericana (AFLA), representó un mayúsculo esfuerzo y una iniciativa virtual sui géneris, que supo aglutinar y desarrollar multidisciplinariamente todo un acervo cultural y científico, haciendo énfasis en los disímiles hechos históricos, enigmáticos en buena medida, que preconizara el Maestro Charles Fort.

En lo personal se trató de una escuela de relaciones públicas, gané amigos-colegas, atesorando información invaluable, manteniéndome actualizado del constante esfuerzo mancomunado en la búsqueda de la verdad: ¿qué son los Ovnis?, ¿de dónde provienen?, ¿qué buscan? y, ¿están conviviendo con la humanidad en regiones inexploradas de la Tierra? A muchas interrogantes los miembros de AFLA trataron de hallar respuestas responsables, rigurosamente transparentes, a un fenómeno inquietante, que no parece, todavía, haber mostrado definitivamente su agenda, o sea, la de los intelectos que se esconden detrás de esos multiformes vehículos aéreos.

AFLA representó un digno momento de la ufología latinoamericana y mundial, que tuvimos el privilegio de compartir. 

JK: De acuerdo con los expedientes que ha tenido en su poder y según declaraciones de los testigos: ¿cuáles son los tipos de avistamientos más frecuentes en Cuba? ¿Incluyen las descripciones de los mismos la presencia de ovninautas? De ser afirmativa la respuesta, ¿podría describirnos brevemente las características físicas de estos, su apariencia, según las declaraciones obtenidas?

OG: Son aquellos que pertenecen al Dossier del Comité y a los grupos repartidos en varias provincias, a los que podemos sumar alguna que otra información independiente o cuyo génesis mediático se origina desde instituciones u organismos estatales - Prensa, televisión, radio, Internet, el Instituto de Geofísica y Astronomía y el INSMET, Instituto de Meteorología, por sólo citar ejemplos. Está claro que la frecuencia mayor está dada en aquellos Encuentros Cercanos del 1er Tipo; los avistamientos del Segundo Tipo en verdad han sido escasos, acaeciendo en un porcentaje relativamente notable, los Encuentros del Tercer Tipo. Los ovninautas que fueron reportados desde los años 50 al presente, pueden diferenciarse así: humanoides, androides y seres catalogados de parafísicos. En cuanto a los intrusos de formas animalescas, los reportes que obran en nuestro poder no han podido ser corroborados del todo.

Tenemos información relativa a seres humanoides, con caretas y trajes plegables, bajando de Ovnis en lugares apartados y/o semi apartados. Personajes de aspecto nórdico o adamskianos, entidades pequeñas, de 1.20 en estatura, otros de constitución robótica, recreando todo un número de seres, que caben en la imaginación del que abiertamente ha estudiado los expedientes mundiales, sin necesidad incluso de apasionarse con la literatura de Ciencia Ficción.

Cuando conocemos en una experiencia cubana de 1952 que un humanoide alto, alado, con indumentaria futurista, se comunica con una campesina cubana, nos percatamos por la fecha, clase de encuentro y características del mismo, su relación con otras análogas, sucedidas en las mismas fechas y dentro de una gran oleada mundial OVNI; que estamos ante algo tan inquietante como fascinante.

Igual podemos decir del caso Zárate, evento un poco más reciente, sucedido un 15 de octubre del año 1995, cerca de Torriente, provincia de Matanzas, en el que nuevamente, y en ese particular, un campesino se ve envuelto en otra situación anómala con la presencia de un humanoide, que baja de un ingenio con forma de jicotea, forma peculiar para los que seguimos muy de cerca la casuística y estadísticas a nivel global.

Otro expediente sensacional pertenece al avistamiento de un OSNI Objeto Submarino No Identificado proveniente de las profundidades marinas, en la propia bahía de Matanzas, observación realizada por decenas de niños exploradores y otros testigos, la mañana del 5 de Julio del año 1959. El objeto con forma de trompo, se elevó vertiginosamente desapareciendo en segundos. 

Una representación bastante fiel de un viajero sideral, podemos advertirlo en una figura perteneciente al panteón aborigen cubano, con el típico atuendo, que nos hacen recordar familiarmente a las famosas estatuillas japonesas, que tanta impresión causó al Maestro Oscar Hurtado. Bayamanaco ha sido estudiado por personalidades cubanas de la cultura, una de ellas la Doctora Thelvia Marín, autora de interesantes obras que reflejan el Universo mítico de aquellos indios precolombinos, sus creencias religiosas y costumbres, animadas por el culto a sus dioses antropomorfos, deidades llenas de complejidades en cuanto a sus variados orígenes, intra y extraterrestre.

Los dioses también fueron vivificados a través del Dios Murciélago. Hubo una representación de ese mamífero volador, que podía contemplarse desde el aire en nuestro país, como es Nazca, Perú, que lamentablemente ya no está, pero que nos recuerda al experto estadounidense John Kell y sus investigados hombres murciélagos y polillas.

Y si nos fijamos cuanto abarca la historia nuestra desde el mismo "descubrimiento" de Colón, diremos que, fue un Ovni el que pre anunció su desembarco en el nuevo mundo, y cuando llegaron a Cuba, recogieron todo tipo de versiones: que si ellos eran los "venidos del cielo", la presencia de depredadores, actuales chupacabras, y hasta la visualización de humanos blancos, vistosos, vestidos con túnicas blancas, los cuales, sin forzar demasiado en ese aspecto, pueden acercarlos a los humanoides con aspecto nórdico. La fantasía y la leyenda se apropiaron del mundo europeo en aquel entonces.

Lo inusual es llevar todo a extremos, asegurando que aquellos personajes blancos no eran más que grullas. Las esferas líticas, comunes en los campos cubanos y que indican distintos motivos, uno de ellos el funerario, muestran, en una particularmente asombrosa, curiosos círculos concéntricos, semejantes a los dibujados en varias cuevas, y ese observatorio astronómico natural que es la Cueva de Punta del Este, en la Isla de la Juventud. 

Ni que decir de nuestra MEGA Ciudad sumergida al norte de Guanahacabibes; y no he sido yo el que teorizó la posibilidad entre tres de ellas, de que fueran trabajos realizados sobre la roca por una civilización anterior, que ahora permanece a unos 700 metros debajo del agua. El triángulo imaginario Guanahacabibes, sur de Mayabeque y Artemisa y la otrora Isla de Pinos, han sido escenarios de increíbles avistamientos de Ovnis y Osnis, confirmados desde el siglo XIX.

JK: Esta pregunta es una inquietud de índole muy personal. Los extraterrestres han sido descritos de las formas más insospechadas posibles, distinguiéndose varios tipos: humanoides, grises, zoomórficos… etc. Suponiendo la remota posibilidad de que pudiéramos ser visitados por ellos. ¿Cree que los mismos pudieran tener un desarrollo biológico tal que les permitiera actuar sobre la materia, en determinado momento, de modo que lograran cambiar su estética o aspecto y pasar desapercibidos en nuestro planeta o que, diciéndolo de un modo menos violatorio, fueran físicamente iguales a los humanos en todos los sentidos?

OG: La posibilidad de visitadores interplanetarios no debe ser tan remota. Recientemente se han podido detectar y fotografiar, lo que sugieren ser sondas, productos, casi seguro, de intelectos superiores tecnológicamente hablando, dentro del ámbito de nuestro Sistema Solar, que, por sus manifestaciones ópticas, trayectorias, formas aerodinámicas, geométricas y demostraciones físicas, no parecen corresponder con nada conocido hasta hoy por la Ciencia astronómica humana, y por supuesto, no son de orígenes artificiales producidos en el tercer planeta azul. Se han recibido señales cósmicas recientemente, que por su periodicidad y/o frecuencia, incentivan el criterio de que se tratan de señales artificiales. Todo lo expresado anteriormente, no ha sido otra cosa que divulgaciones realizadas por científicos de punta, pertenecientes a beneméritas y prestigiosas instituciones y universidades estadounidenses y europeas.

A su pregunta de si podrían actuar sobre la materia, no me cabe la menor duda. La Ciencia terrestre hasta hoy ha logrado la invisibilidad, traspasar los límites del Sistema Solar y crear organismos capaces de nutrirse del plástico, por ello, debe admitir que los hermanos del cosmos pueden utilizar su cerebro para, a través del tacto, hacer funcionable una nave, que en parte pudiera estar constituida de materia orgánica, condicionada por la manera en que los tripulantes logran manipular sus vibraciones o energías psíquicas. Roswell es quizás el primer exponente conocido, aunque puede cuestionarse, porque sobre ese incidente existen muchísimas teorías que involucran a factores tan inimaginables, como aquellos que invocan al realismo fantástico. No obstante, la cuestión de que si los foráneos -así suelo llamarles- han sido capaces de crear una nave simbiótica (y al respecto ha habido declaraciones serias que lo atestiguan) u otras con motores antigravedad etc., no resultaría una quimera ni simples relatos alucinantes. Hoy se sabe que la investigación sobre la antigravedad, era algo más que una escalofriante propuesta de laboratorio, durante los oscuros años de la Segunda Guerra Mundial. Intentemos considerar, por tanto, y sólo una vez al menos, cuántas maravillas aéreas deben estar diseñadas, fabricadas y casi seguro probadas en la actualidad.

Si los objetos desconocidos cambian de forma ¿por qué no pueden hacerse invisibles? En verdad se han realizado fotos, en la que a simple vista no fueron observados los Ovnis. El Licenciado Marcos Rodríguez y yo desde el 2011 hasta el 2014 realizamos incontables tomas diurnas y nocturnas con resultados asombrosos.

Soy de la opinión de que los ETs son casi idénticos a los humanos; en el Universo los compuestos orgánicos y la presencia de agua están presentes. También hay indicios constantes de que la NASA está colaborando con sectores científicos y universitarios, para preparar el ambiente psicosocial que debe anteceder a las primicias, de lo que sería el contacto público y oficial, cuestión esta que podría tardar lustros pero que pudiera suceder este mismo año.

Después de haber sido testigo OVNI, de haber tenido en mis manos, un posible fragmento de desecho de una de esas máquinas foráneas, puedo decir sinceramente que he visto y he tocado. Es fácil desestimar ciertas fotos tomadas por personas serias y entrenadas, y tildarlas de insectos, gotitas de agua en el lente y otros artilugios o prefabricados trucajes. Nuestros colegas analistas han llegado a la conclusión de que varias fotos y videos tienen la mayor probabilidad de ser positivos, al captar cuerpos u objetos que física, óptica y tridimensionalmente obedecen al término OVNI.

Hay algo que debían conocer mejor los que niegan, y es que en la Antártida se han fotografiado y filmado objetos desconocidos. ¿Es que acaso los insectos del trópico pululan por aquella región? ¿Hay alguien tan osado en suponer que un cada vez mayor número de naciones gasten dinero de su presupuesto para buscar imágenes de insectos, perseguir e interceptar anomalías naturales, y construir radiotelescopios para captar señales reñidas con los extraterrestres? Es cómodo negar. Y es incómodo entender que estos alienígenas poseen capacidades extrasensoriales, que la utilizan, y de ahí parten toda una gama de conocidos y perturbadores sucesos, aberrantes o inexplicables, que en otras épocas como la medieval y más atrás, tenían otras cómodas respuestas pre establecidas. Sería increíble no razonar a estas alturas con la lógica del homo sapiens, que ellos, ya no tan subrepticiamente, están, desde tiempos pretéritos, entrando y saliendo de la atmósfera terrestre. Evidentemente, la lógica humana no necesariamente tiene que asemejarse a la de ellos. Un mensaje positivo muy terrícola, espiritualmente hablando, sería entender que quienes viajan distancias enormes para llegar hasta aquí, debieron haber superado las guerras, y, al haber resuelto evitar la hecatombe nuclear, superado por el interés en el entendimiento como prioridad de esa otra civilización, estaría en condiciones de mostrarnos otras alternativas provechosas, demostrando que la negatividad fue superada y pertenece a su prehistoria, sólo un recuerdo por siglos de atavismos.

Ahora bien, si no es como anteriormente reflexiono, basado en la realidad del momento OVNI actual, hay que revalorizar cuanto conocemos del misterio. Porque si no son aliens y pertenecen a nuestro mundo, desde antes, y se esconden en zonas apartadas y recónditas de la Tierra, - propuestas aún en boga - podremos estar en condiciones de ser un poco más aptos a la realidad del mundo que nos rodea, realidad actual y la de pasados tiempos. Y entender mejor por qué el mundo de hoy es como es.

JK: De todos los casos presentados hasta ahora, ¿cuál ha sido el más difícil de esclarecer por los ufólogos cubanos?

OG: Decir cuál ha sido el más difícil no es fácil, porque una cierta y voluminosa cantidad de avistamientos, tienen la característica de ser sumamente impredecibles, y es ahí que, por tanto, se convierten en sumamente imposibles de dilucidar adecuadamente por la metodología científica, amén de proyectarse ilógicamente y de manera sutilmente ajena a nuestra comprensión y entendimiento. Es cierto que existen Leyes físicas que aún desconocemos, que espiritualmente el ser humano todavía no está apto para descubrirlas, sin que esto sea necesariamente proporcional a la amplitud cultural y desarrollo tecnológico que se preconiza actualmente. Son cosas diferentes.

Hoy sabemos más del Universo que de lo que hay debajo de nosotros y en algunos fondos abisales. Por otra parte, los expedientes de mayor peso a nivel planetario, están bajo la férula de la mayor secrecía; entonces queda claro cuál es el estimado de la situación: todos los casos son difíciles, añado, pero los de mayor average enigmático son aquellos en que tanto la experiencia como los testigos son ridiculizados, omitiéndose tratar seriamente su divulgación, siendo el más denso el que provoca inquietud en grado mayúsculo a sectores de interés. Por eso es preciso apelar a las propias vivencias, por ejemplo, la vivida por mí la media noche del 25 de mayo de 1975.

Desde mi propia casa, observé hacia el Este y a unos 45 grados sobre el horizonte, en una noche estrellada con el cielo límpido, un disco azuloso, que, desprendiendo una estela del mismo color, caía vertiginoso después de aparecer abrupto en el firmamento. Al cabo de unos segundos, dicho objeto -y antes de caer lejos en el horizonte- realizó un giro vertiginoso hacia la izquierda y otro hacia arriba, y otro enseguida a la derecha, haciendo un lazo, ya que cuando pasó por un punto de su trayectoria original desapareció. Para mí era obvio que no era un avión o satélite, ni de un meteoro ni se trataba de un globo sonda. Ese es mi caso más difícil, el que experimenté con el sentido de mis 20 20, pues tenía sólo 25 años de edad y conocía de Ovnis lo suficiente.

Para mis pares, y me incluyo, creo que el paso de una de las denominadas naves nodrizas sobre el archipiélago en los 80 del pasado siglo, o el caso de supuesta teleportación humana desde la región espirituana hasta Ciudad Habana, son representativos nada dóciles para cualquier investigador serio. Tenga presente que, si algo camina en cuatro patas, dice miau, le brillan los ojos, tiene bigotes y anda por los tejados, no puede ser un rinoceronte. ¿Se entiende? No bastan los indicios, hay que tener delante, en blanco y negro, los documentos que se guardan celosamente en quién sabe cuántas gavetas a lo largo y ancho del planeta, y desde tiempos anteriores al avistamiento de Arnold el 24 de junio del año 1947. Porque si revisamos la prensa del período comprendido entre noviembre de 1896 y abril del 1897, quedamos impresionados por la vastísima oleada de naves aéreas estrambóticas, muchas de ellas tripuladas por semejantes, biológicamente hablando.

JK: Algunos reportes sobre OVNIS en el mundo apuntan a que la inteligencia es extraterrestre. Sin embargo, cuando se realiza un estudio más profundo las conclusiones muchas veces es que se trata de fenómenos que pertenecen al reino psíquico y al reino mítico. ¿Qué tuviera que decir al respecto?

OG: Gustav Jung, psicoanalista y el famoso ufólogo Jacques Vallée en sendos trabajos, incluyeron estas variables dentro del estudio analítico del problema planteado por el fenómeno OVNI en cuestión. Otros autores de cierto relieve ven la presencia abrupta del disco volante en nuestros cielos, presentando hipótesis, que, de acuerdo a su profesión, posibilidades de relaciones a determinados niveles y convicciones esotéricas, orientan sus espacios al respecto, desde el origen interdimensional hasta recorrer caminos que terminan tomando forma de mezcla entre el Realismo Fantástico y la historia de la tecnología. Así vemos, el inicio de teorías que conspiran contra la veracidad en la cotidianeidad investigativa mundial, logrando escalar dentro de una mitomanía que poco favor le hace al enfoque investigativo por muy ortodoxo que parezca.

De tal manera se le hacen guiños a la denominada teoría de la Tierra Hueca, cuando debían percatarse que ellos pueden estar muy profundo, debajo de nosotros, sin tener que la Tierra ser hueca, y no ser parte de un juego de ajedrez rodeado de aristas tendenciosas. Esto lo repetiré hasta la saciedad. Porque vuelvo de nuevo, resulta una teoría interesante, porque no habría que situar en Zeta Reticuli a los peregrinos del cosmos, preocupados por su supervivencia. Más preocupados debían estar los supuestos intraterrestres que conviven junto a nosotros, podemos preguntar, por nuestras locuras nucleares, químicas y biológicas alterando el medio natural y la salud del planeta. Al menos existe una lógica a favor de la anterior presunción, y pueden aparecer otras más con razonamientos menos apocalípticos, y argumentos validados para ello por diferentes aportes, formando un abanico histórico cultural de incontrastable apariencia exótica.

Soy asiduo de las obras del genial investigador estadounidense John Kell, investigador del tan traído y llevado Hombre Polilla, que enfrentó incluso a los ufólogos tradicionales. Al leer sus trabajos observo dedicación y entrega, aunque los mismos tienen que ver un poco más con el folklore que con los Ovnis. Es que el estudio OVNI es demasiado abarcador y toca las almas de quienes lo investigamos. Creo que si los visitantes con sus capacidades cerebrales, su tecnología desarrollada, su ética, que no tiene que ser, recalco, similar a la de nosotros, junto a la premura de sus investigaciones en el ser humano, entre otras cuestiones, nadie sabe por qué y hasta qué punto, podemos inferir que en cierta medida somos vulnerables y manipulables. Repito, si provienen del espacio exterior, el apoyo que nos brindarían sería indirecto. En pasajes religiosos antiguos vemos a humanos interactuando con "venidos del cielo", humanos raptados, humanos viajando en naves que miran cómo la Tierra es redonda y se pone en cada momento más diminuta. Son eventos que de nuevo sólo tienen el nombre.

Ahora bien, hay fotos de Ovnis auténticas, existen videos irreprochables, detecciones del radar que no mienten, aviadores y astronautas, cuyas costosas misiones y la responsabilidad adquirida no les permite la confusión, un colibrí es diferente a un F- 117 y el último, aunque se asemeje, no es un OVNI, y menos si tiene aspecto o forma de plato, cilindro, trompo o campana. Los equipamientos tecnológicos, cámaras y computadoras no padecen de enfermedades de los sentidos, y son los encargados de salvaguardar la seguridad, o, en ocasiones, dar soluciones inexcusables a los jueces en juicios importantes. Hoy en día, varios científicos de la NASA están convencidos de que, en satélites del Sistema Solar, entre ellos Titán y Europa pueden contener vida inferior, pero vida al fin.

Respecto a la Teoría de la Distorsión, que maneja y explica sustanciales explicaciones, la acepto como una muy importantísima herramienta, capaz de ofrecer explicaciones más satisfactorias, dentro del complejo conjunto de inconmovible confusión a que nos tiene sometido el misterio OVNI. La experiencia del matrimonio Hill puede perfectamente documentarnos, con sus múltiples facetas. La influencia externa que antecedió al hecho, junto a factores aparentemente inexplicables que los indujeron, producen una visión nueva en el historial OVNI a partir de ahí. Elementos de distorsión se hacen presente en ese y otros muchos casos. Algo, alguien está detrás de todo esto, y nuevamente enfoque de que no son los extraterrestres. En la historia contada por los Hill bajo hipnosis, observamos que a ellos los secuestran humanoides con uniforme y luego son "atendidos" por otros con fachada de médicos. Elemental Watson, diría Holmes. El viaje interrumpido de los Hill fue el inicio de las grandes intrigas, y a su vez de las grandes explicaciones como apuntaba el gran Carl Sagan que debía tratarse estos enigmas. En la Teoría de la Distorsión puede que estribe el principio a estas soluciones que tanto necesitan explicar los investigadores.

  

JK: ¿Podría decirnos su punto de vista y posición en un tema tan controvertido como el de las abducciones?

OG: Sé lo que es el haber transitado en varias oportunidades por la parálisis del sueño, me sentía despierto, atado a fuerzas que me inmovilizaban. Y en ese estadio en que parece uno creer estar despierto sin estarlo, siento que me levanto y puedo ver mi entono, rodeado de pequeños humanoides, típicos, unas veces oscuros y otras grises, de cabezas desproporcionadas, grandes ojos y pequeñas estaturas. Cuando, haciendo un esfuerzo mental retorno a la normalidad, me sentía conmocionado, aunque en verdad nunca sentí temor o me produjo trauma esas experiencias oníricas si se quiere.

Por lo pasado anteriormente creo que, en cierta y determinada medida, estas experiencias pueden deberse a esa parálisis. Hay cientos de casos en todo el mundo, investigados por especialistas de renombre. Lo acontecido a T. Walton en Estados Unidos hace decenios, o al matrimonio Hill, resultan sintomáticos. Aquí en Cuba hemos analizado algunas abducciones, y en el Documental del desaparecido Octavio Cortázar, se muestra un ejemplo contundente, que implica presencia de humanoides aparentemente experimentando con una persona, que, en todo momento, se mostró colaboradora en el proceso de tratamiento bajo hipnosis. Todo puede ser posible en este mundo casi redondo, lo que tenemos es que expandirnos mentalmente. Si se busca se encuentra, y lo que debe hacer todo investigador, incluso los que ven en las abducciones algo real, - me incluyo - es hurgar.

Vamos a encontrar casos de implantes orgánicos, algo que a muchos les nubla toda perspectiva porque se acercan al fenómeno prejuiciados, llenos de elementos puramente materiales, y lo que puedo asegurarle ahora mismo, es que somos algo más que reflejos condicionados e incondicionados. Hasta algunos animales sienten inquietud ante la presencia de Ovnis y humanoides, a veces, cuando se manifiestan visualmente sólo para ellos. Son cosas que ahora no parecen tener mayores explicaciones. Buscar, investigar; los elementos para el estudio profundo están accesibles, aunque se traten de pruebas indirectas claro está.

Los extraterrestres pueden estar ubicados en Marte y no ser precisamente marcianos; una antigua civilización puede vivir en zonas profundas de la litosfera sin necesidad alguna de que nuestro mundo sea hueco, según creencias que se resisten a ser peregrinas, y que no pertenecen ni mucho menos a la época reciente o actual. Cuando analizamos algunos aconteceres dentro del plano de las abducciones y hasta en secuestros, que existen versiones ofrecidas por los que sufren esos no solicitados pasajes, que son elaborados o inducidos -por la propia mente rezan unos, o por influencia externa según otros- sobre su rápido tránsito hacia una nave mayor que circunda el planeta, hasta los que son trasladados al interior del mismo planeta, siempre, por supuesto, en un OVNI y por EBEs (Entidades Biológicas Extraterrestres), o digamos... Intraterrestres EBIs.

JK: Algunos autores plantean que los rastros físicos de los OVNIS tales como marcas producidas al aterrizar, suelo alterado químicamente y motores o equipos que empiezan a fallar pueden explicarse por la psicoquinesis humana, o sea, por la hipotética capacidad de la mente para influir en la materia y energía, sin causa mecánica observable y desafiando el espacio y el tiempo. ¿Podría decirnos su opinión sobre esta teoría partiendo de su vasta experiencia?

OG: Creo que se trata de efectos o experimentos electromagnéticos. Los ovnis producen un campo magnético capaz de neutralizar equipos, naves, autos y hasta misiles. Las versiones y documentaciones indican que por ahí fluye su poder tecnológico. Estos campos son los responsables en alguna medida, de las huellas o nidos dejados por ellos, tierra chamuscada incluso con residuos en ocasiones con cierto contenido de radiactividad.  Pienso que la mente humana es prodigiosa y la de ellos debe ser superior en capacidad cerebral. Influir en los humanos directa o indirectamente, frente a ellos o desde una nave es posible, pero, a mi entender, es su tecnología superior la causante de incidentes, desde brújulas dislocadas pasando a detener vehículos en carreteras, hasta provocar efectos fisiológicos y perturbaciones sensoriales a testigos. Sabemos que la mayoría de los abducidos pierden la memoria, inducidos por ellos, y evocan sus recuerdos cuando son sometidos a la hipnosis regresiva, siempre bajo la batuta de profesionales. Y aclaro que al decir "ellos “me refiero a intrusos que deben o pueden tener diversos orígenes y agendas. Lo curioso emerge cuando aparecen relatos implicando a humanos junto a las entidades aliens, es decir humanos con uniformes médicos o militares, valga la redundancia.

JK: Para los que se acercan por primera vez al fenómeno OVNI, ¿cuáles son las zonas más recurrentes de avistamientos en nuestro país?

OG: Hay zonas llamadas calientes en las que proliferan con mayor frecuencia, territorios más comunes son, el sur de las provincias de Matanzas, Artemisa y Cienfuegos, aunque en los últimos tiempos se han reportados en casi toda la nación, particularmente en la capital.

En todas las provincias son observables desde 1950 en adelante. En cuanto a horarios de avistajes, los mismos no presentan tendencia, pueden manifestarse en cualquier horario, los crepúsculos y amaneceres. 

De nuestros cayos adyacentes se tienen reportes interesantes, por ejemplo, en Cayo Largo del Sur se han tomado dos testimonios fotográficos con resultados halagüeños, que le dieron la vuelta al mundo, uno tomado de día y otro de noche, objetos celestes fotografiados por extranjeros, uno de ellos casualmente ufólogo. Para un espacio de territorio tan pequeño, es sintomático, muy representativo.

JK: ¿Cuáles son las ediciones cubanas (revistas, magacines…) dedicadas al tema ufológico en la isla y a través de qué medios pueden adquirirse? ¿Cómo considera la divulgación del fenómeno OVNI en Cuba: ampliamente extendido o de poca difusión?

OG: En enero del año 2000 en la Revista villaclareña "Signos", que fundara el genial investigador cubano Samuel Feijó, publicó un número completo en el que tuvimos la oportunidad de colaborar, un elevado porcentaje de investigadores ufólogos y científicos cubanos y extranjeros. Esta ocasión marcó un hito sin precedentes, en cuanto a la divulgación de ese temático complejo abreviado OVNI. 

Posteriormente, el grupo Orión de Artemisa logró realizar, durante casi un año, su propia Revista-Boletín, en la que insertamos, no pocos miembros de agrupaciones ufológicas, una variada colaboración, dando a conocer nuestras inquietudes y criterios con entera disposición y entrega. El Dr. Jorge R. Bermúdez, intelectual y profesor universitario en la Cátedra de periodismo, escribió y publicó su interesante libro "Ovnilogia Cultural”, que, remarco, también expone trabajos relativos a la investigación OVNI dentro del territorio cubano, y cuyas tiradas se hicieron en el marco de la Feria del Libro en La Habana y Villa Clara, hace casi una década. El Dr. Bermúdez es directivo del Comité. La realización de boletines, fue una idea que el PIFAAM buscó desarrollar siempre; la escasez de materiales y el hecho de no tener un estatus de Asociación consolidado, impide la consecución de esta variante divulgativa básica en cualquier asociación, y nos preguntamos: ¿por qué no dentro del programa del Comité Gestor y sus agrupaciones en distintas provincias, una vez consumado el proceso de legalización? Estas publicaciones editoriales podemos solicitarlas en Bibliotecas Públicas, y la Biblioteca José Martí y la Martínez Villena, en Ciudad Habana, son dos centros en los que pueden consultarse con seguridad.

En lo relacionado con la divulgación OVNI, en estos momentos depende en lo fundamental de lo que podamos hacer los interesados, que somos nosotros, los ufólogos cubanos. Ciertamente, estamos en presencia de un fenómeno que se resiste a ser refutado, de un "mito" que se niega a desaparecer, porque sencilla y llanamente resulta imposible. Es un fenómeno en apertura constante, que necesita la apertura mental de todos los que tienen en sus manos la proyección y dirección de documentales, programas televisivos o radiales, y espacios virtuales entre otros.

Por lo anterior, considero que las instituciones culturales y científicas deben ser más flexibles y comprometidas, para salir lo suficiente de ese impás, con sus diferentes derivaciones, en detraimiento de una divulgación que merece un tratamiento especial, por la cultura general de avanzada que preconiza.

Los ufólogos cubanos podemos ofrecer una colaboración invaluable, si todos somos capaces de reintentar juntos una nueva y definitiva jornada de entendimiento. Mientras prevalezcan las distancias entre los que piensan que la ufología no tiene futuro, porque no han encontrado a estas alturas la arandela o la tuerca de un platillo volador, y los que pensamos al mismo tiempo que vale la pena estar en sintonía con nuestro tiempo, y las realidades ocultas dentro del fenómeno Arnold, como así le llaman en otras latitudes geográficas. No se trata solamente de confrontar sin prejuicios la cuestión con una dialéctica diferente. Los criterios encontrados tienen un marco de solución inteligente, y eso motivan las charlas, tertulias, video debates y conferencias, que en nuestras instituciones ya, independientemente de los duros períodos especiales, supieron en años anteriores abrirnos las puertas durante bastantes años.

Confieso que no estoy satisfecho, ni mucho menos. Creo que el historial OVNI necesita ser ampliamente divulgado ahora más que nunca, armonizando todos aquellos factores individuales y colectivos que suman intereses multidisciplinarios, como antes, entre 1998 y el 2014. No es difícil imaginar estos cinco últimos años, haciendo lo indecible por hacer posible un mínimo de divulgación, debido a problemas objetivos y subjetivos en algunos casos. Lo que sí puedo asegurar, aquí y ahora, es que ya no somos tan vulnerables, que nuestras realidades ufológicas están siendo mejor comprendidas y/o adecuadamente canalizadas. Y sabe ¿por qué? porque hemos sido y nos hemos comportado de manera realista, y ese atributo nos ha identificado en todo momento, a lo largo de estos fascinantes y, particularmente ingratos -pues nos frustra el no haber logrado una de las metas principales: el estar legalmente constituidos- veinte años.

JK: ¿Qué recomendaciones podría darle a los que transitan por primera vez este camino?

OG: Mucha perseverancia, voluntad y amor a la investigación ufológica. No sean fanáticos nada más que a los deportes. Siempre van a existir obstáculos e incomprensiones, aunque ya no estamos en la etapa medieval. Sean ustedes mismos sin dejar de entender que viven entre los demás, y que casi todos, por Ley de la existencia, tenemos diferencias espirituales, que estas influyen en nuestro modo de ver y comprender el mundo y las cosas, no estando la historia OVNI exenta de instantes maravillosos, y momentos de tinieblas que pueden ser superables sin lugar a duda. 

Y que cada día que transcurre se levanta una mayor cantidad de científicos, proclamando a los cuatro vientos que las visitas alienígenas responden a una insoslayable realidad, imposible de negar a estas alturas de la historia humana, que el Universo y numerosos exoplanetas descubiertos no están solamente adornando espacios vacíos. En definitiva, evitar comportamientos dogmáticos.

El Apóstol de nuestra independencia José Julián Martí Pérez, escribió en "Dos Patrias" una vez, y he aquí uno de sus luminosos fragmentos: "El Universo habla mejor que el Hombre". Mi otro Maestro, Oscar Hurtado me dice ahora: " Hasta aquí es suficiente". 

Muchísimas gracias a Orestes Girbau por dedicarme parte de su tiempo para la realización de esta entrevista.