Por Orestes Girbau
En fecha reciente me preguntaron si en nuestros archivos tenemos registrados encuentros con OVNIs de forma semi circular. A tal efecto mi respuesta fue inmediata. Si, y no son pocos.
Para no atiborrar a los lectores, los ejemplos que expongo son lo suficientemente verificables o han sido transmitidos bajo juramento por investigadores responsables.
El PIFAAM, constituido en la Ciudad de Matanzas en abril del 1997, posee un archivo cuyo contenido notifica una presencia regular de esos visitadores volantes por los cielos cubanos.
Para Henry A. Morales, vecino de Sagua La Grande Villa Clara, se trata de un hecho singular el haber observado sobre su pueblo natal -en Sagua- un raro objeto volador, sin producir sonido alguno, emitiendo luces variadas brillantes y cuya forma era semi circular. El testimonio aparece en la revista Juventud T. no. 22 de septiembre/1986.
La madrugada del 19 de noviembre/2005 unos vecinos en Lajas, provincia Cienfuegos, vieron un aparato volante no identificado con forma de media luna horizontal, emitiendo una intensa luz roja muy brillante en derredor, y a la altura de una milla. Sus movimientos eran variables, de derecha a izquierda y de arriba hacia abajo dirigido al pueblo de Cartagena. Debajo del ingenio brotaban como llamas.
Daisi Fdez hubo de efectuar la denuncia del anterior caso por medio de una llamada que ella nos hiciera posteriormente. La testigo vive en carretera Laja no 30 A Cienfuegos.
Tuve el honor de conocer en los 70 del siglo pasado al desaparecido amigo y colega José S Duque, residente entonces en el municipio Limonar, Matanzas. Era aficionado a observar el cielo utilizando su telescopio de 2.5 pulgadas. Alternaba con su oficio en una imprenta local y el revelado de fotos en el cuarto oscuro del establecimiento.
Una vez compartiendo el tema que casi siempre nos ocupaba, me confiesa personalmente primero, para luego entregarme un informe escrito, sobre un evento acaecido en el cielo nocturno de Limonar una noche estrellada.
Narra con toda la sinceridad que le caracterizaba, su avistamiento de un OVNI semi circular, la noche del 8 de Enero de 1975. Eran las 9.30 pm. Diez minutos antes -relata- se produjo un corte de luz en el pueblo. El objeto asemejaba la cabina de un aparato comercial civil como flotando en el aire y un cielo limpio de nubes sin luna. Estaba ubicado entre los 35 y 45 grados sobre el horizonte de Norte a Sur. El movimiento del cuerpo era MRU - unos 300 a 400 km/h.
De aspecto material su longitud inferior aparente abarcaba un tanto mayor al de una luna llena, ocupando de largo la cuarta parte aproximada de la misma. La experiencia duraba alrededor de un minuto. El color del OVNI era amarillo tenue, siendo sus extremos adornados por dos columnas parecidas al metal verticales, de colores azul gris algo tenues y difusos.
Tomando como referencia el minuto transcurrido y conociendo que su telescopio siempre estaba armado, me bastaron para entender que lo pudo ver mejor definido, de otra manera ¿cómo era posible observar las columnas extremas viniendo el testimonio de una persona que usaba espejuelos potentes para ver mejor? Nunca me dijo nada y yo tampoco le hice de nuevo la pregunta. El avistamiento quedaba tal y como lo argumentaron sus declaraciones y para todos nosotros quedaba validado.
Un 21 de diciembre de 1994, Mariana Hdez, vecina de Cayo Ramona, sur de Matanzas, junto a otros testigos, observaron un ingenio volador casi ovalado de predominante color rojo, que se desplazaba por el aire. El avistaje se mantuvo por 15 minutos siendo visto en el pueblo de Jaguey Grande y denunciado por un profesor que responde al nombre de Pedro.
Semejantes formas han dado lugar en cierta medida a titulares, el diario Juventud Rebelde a fines de enero del 1989 informaba del evento observado por pobladores ubicados al sur este de la Isla de la Juventud. Lamentablemente nunca pudimos entrevistar al colega Ribera que estaba entonces ejerciendo funciones en la Oficina Territorial de ese Municipio especial.
Desde el siglo XIX han sido observado estos peculiares objetos. Si nos atenemos al dibujo realizado por Walter Maunder desde Inglaterra, hombre de ciencia reconocido, o los casos observados por aviadores estadounidenses en 1948, apenas iniciada la etapa OVNI de la pos guerra, nos damos cuenta que existen similitudes apreciables. Pero podemos buscarlos en los testimonios de la antigua Roma, en las fotos y videos tomados por los pioneros espaciales terrestres, en dibujos de menores de edad y declaraciones e informaciones desclasificadas.
Todo indica que los No Identificados y sus probables tripulantes, independientemente de su procedencia y de lo que buscan en nuestro planeta, siguen venciendo al tiempo.
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