EL ROSWELL CUBANO

Por Orestes Girbau Collado

 

A Sergio Mena, mi humilde amigo y colega desaparecido físicamente.

 

(El único caso reportado de un estrellamiento OVNI en Cuba)

 

Información preliminar:

Cuando decidí abordar la interesante experiencia del estrellamiento OVNI cercano al pueblo de Jovellanos en provincia Matanzas, Cuba, lo hice consciente que el mismo me iba a llevar hacia otro callejón sin salida, por las siguientes razones:

 

•        Carencia de un proceso mediático independiente realizado con inmediatez al caso.

•        Determinada secrecía detectada una vez pasada las 24 horas de acaecido el suceso.

•        Un proceso desinformativo y procedimientos que se asemejan al accidente Roswell.

•        Internacionalmente, a ese hecho no se le presta ninguna consideración periodística.

•        El 95 por ciento de los testigos no pueden atestiguar siete décadas después.

•        Los archivos, presumiblemente clasificados de la época, no están disponibles.

•        Ningún ufólogo cubano hasta el presente había hallado ninguna información.

•        Después del evento se impuso el descrédito que resultó óbice a su investigación.

 

Palabras del autor

 

A lo largo del tiempo la fenomenología OVNI nos ha planteado toda una diversidad de aspectos, características, peculiaridades, influencias psicosociales e intrigas. Hasta el día de hoy nadie ha determinado orígenes, formas de traslación ni intenciones de sus foráneos tripulantes, robots programados o naves sondas.

Los Encuentros Cercanos han puesto de manifiesto, sobre todo a partir de la Segunda Guerra Mundial, que algo está sucediendo en nuestro planeta y su entorno espacial, que posee su propia agenda, tecnología y/o historial.  Las colisiones de estos probables ingenios desconocidos representan otra novedad –aunque no contemporánea– como parecen ser los Círculos en las cosechas, por citar un ejemplo.  Estos raros incidentes ocurrieron antes, en el siglo XIX, por Aurora Texas, durante la oleada UFO del periodo 1896–1897 en E.U.  Objetos sin identificar se han accidentado o pueden haber sido incluso derribados, en Norteamérica, Brasil, Argentina, Chile, Italia, Australia y Sur África, si sólo nos viéramos obligados resumir unos cuantos países, en lo que a estrellamientos presumiblemente extraterrestres se refiere. 

Cuba no estuvo marginada (ejemplos hay suficientes) de tales visitas, que incluyeron secuestros alienígenas y teleportación humana.

En nuestro territorio, específicamente en la Provincia de Matanzas, se produjo todo un fenomenal acontecimiento, que luego de haberse redescubierto, y lejos de haber se agotado su investigación, marca un hito sin precedente para el abrumador estudio ufológico comparativo en el área caribeña. Claro está, es obvio que no fue nada fácil investigar este evento lleno de lagunas, siendo el factor tiempo un pésimo obstáculo, junto a condiciones y circunstancias que se deben sumar para todo investigador en un entorno poco propicio.

Analizado el expediente, entiendo que es momento de desclasificarlo. Creo que la ufología requiere de este oportuno aporte; también considero el tener que enfrentar momentos desagradables que se derivan siempre en toda búsqueda de la verdad.

 

El caso que inaugura la era OVNI en Cuba.

 

Diversas fuentes comunican frecuentemente sobre máquinas de procedencias desconocidas que han colisionado o descendido en diferentes latitudes geográficas del planeta durante los últimos siglos; un clásico ejemplo trata del Caso Roswell, incidente  donde un aparente objeto volante no identificado indica haber accidentado durante el verano de 1947.  Esta faceta inquietante de la casuística OVNI, también ha estado presente en el contexto ufológico e informativo cubano.

 

 

Fig 1   "El Caso Roswell desarrolló toda una serie de intrigas que aún hoy perduran"

Acorde con lo reseñado, todo indica que algo impactó, apenas iniciado el decenio de los años 50, muy cerca del pueblo de Jovellanos, Matanzas, un poco antes del amanecer.  En efecto, durante el temprano 10 de febrero del año 1950, hubo de suceder el antes mencionado evento.

Primero que todo hagamos énfasis sobre un aspecto importante a considerar, si queremos hacer determinado juicio respecto al controvertido hecho, motivo de posterior análisis.  Refiero y cito la presencia de una historia real, por tanto, no debe o puede ser en cuestión subestimada. Nunca antes el tema OVNI-ET había alcanzado la correspondiente altura divulgativa en nuestro archipiélago.

Numerosos vecinos observaron y posteriormente denunciaron, la presencia de un veloz cuerpo volador en forma de brillante disco, el cual no producía ruido alguno, trazando, al mismo tiempo, una estela luminosa por encima de las edificaciones.  Los lugareños alarmados, siguieron visualmente la ruta del inesperado visitante celeste mientras volaba, percatándose ellos,  inmediatamente, que dicho aparato descendía violentamente, motivando, en algunos de ellos, su rápido desplazamiento hacia el lugar donde afirmaron se había  precipitado.

 

             Fig 2. "Varios vecinos testigos del hecho se trasladaron con premura al lugar"

 

Juan Rodríguez, muy conocido en el pueblo, fue el primero en llegar al punto exacto del accidente. Y cuál no sería su asombro y el de sus trasnochados acompañantes,  cuando vieron que el intruso celeste, cuyas dimensiones se hacían notar, estaba ahí frente a ellos. El punto de colisión, según los testigos, está ubicado entre los kilómetros 163 y 164 de la Carretera Central. Inmediatamente pudieron observar que, ante ellos, había una sospechosa tecnología en apariencia difícil de reconocer. 

Con toda premura, los protagonistas iniciaron la recogida del exótico material, trasladándolo al cuartel del Ejército de Jovellanos, razón que desvirtúa lógicamente cualquier charada inescrupulosa, gestada por los individuos que participaron en tan sui géneris equipo de rescate.

Debido a la expectación provocada, las autoridades militares, apoyadas por especialistas competentes, iniciaron una investigación que, como debe inferirse, debía apoyarse, fundamentalmente, en el aspecto que concierne ineludiblemente a una probable violación del espacio aéreo nacional.

 

    Fig 3.  "Titular del periódico provincial El Republicano de Matanzas"

 

Algo resultaba incuestionable:  el estrafalario vehículo o aparato, estaba ya depositado en el interior del cuartel para su posterior desmitificación.

¿Significaba todo ello un patético artilugio, una burda historia prefabricada de ante mano?

Al día siguiente se produjo un lacónico desmentido, catalogado por este autor del tipo semi–oficial.  La comunicación suministrada, manifestaba que los pobladores implicados solo dieron falso crédito al declarar que el objeto era un disco volante. Las fuentes aseguraron que se trataba nada menos que de un aparato radial.  Autoridades responsables refutaron el comunicado sobre el origen extraterrestre, cuando anunciaron que el curioso hallazgo había sido examinado por técnicos electricistas.

Si hacemos aquí un paréntesis, pudiéramos tal vez aportar razonamientos al controvertido argumento, que señalaba la presencia de un sistema radial convertido virtualmente en chatarra.

Haciendo una cronología del fenómeno OVNI hasta ese momento en Cuba, nos podemos dar cuenta que carecía de perspectiva. Hasta esa fecha, aseguro, no se había producido caso alguno de interés en el territorio nacional, por lo que resultaba conmovedor la caída del incógnito objeto luminoso.  Los radios no se transportan solos por aire, veloces, silenciosos, dejando atrás estelas meteóricas, y, sobre todo, viajando paralelos en relación a la superficie y por encima de los tejados. Los testimonios dieron cuenta sobre lo observado, claramente, hasta el final del proceso, constatando que se trataba de un vehículo cuya artificialidad nunca nadie puso en duda.

Debemos hasta ahora concluir que el aparato recobrado no se podía explicar, al menos como un radio convencional.

 ¿Que era realmente ese aparato?   ¿Por qué 24 horas más tarde se ofrece el desmentido y no ocurre antes de manera inmediata?   ¿Qué sucedió en el interior del cuartel ?

Inesperadamente, a 48 horas de transcurrido aquel suceso, el Estado Mayor del Ejército anunciaba lo siguiente:  "No se ha confirmado lo del Disco Volador. El Estado Mayor no ha recibido informes hasta este momento de los jefes militares, tanto de Coliseo y Limonar, como de los puestos ubicados en Varadero y Jovellanos en el sentido de que fuera avistado un disco". El comunicado añade: " La Guardia Rural, como es usual en estos casos, no ha reportado nada oficialmente a la superioridad". 

Debemos estimar que el avistamiento se circunscribe al pueblo de Jovellanos y sus alrededores, pero, el disco volador no había sido visto por los militares del propio cuartel, lo que facilita a cualquier investigación honesta seguir la ruta fugaz del todavía misterioso visitador.  Causa perplejidad un fragmento del escueto comunicado:  "como es usual en estos casos".   ¿Es que acaso estaban ocultándose otras experiencias similares o parecidas, vinculadas a eventos UFO dentro del territorio cubano?

 

                Fig 4.  "Cuartel de Jovellanos"

 

La prensa provincial informaba el 13 de febrero que el antes mencionado Juan Rodríguez había hallado, entre Jovellanos y el pueblo de Perico, un rarísimo aparato circular, que media aproximadamente unas 20 pulgadas de diámetro. Igualmente refería que dicho objeto tenía la siguiente inscripción:  1– 13 – U  y un dispositivo de radio, resumiendo que " las autoridades no han informado nada oficial al respecto".

Es impensable pretender que alguien hasta el momento no se haya percatado de una probable maniobra. Me explico: Siguiendo la secuencia coherente del evento, descubrimos que 72 horas posteriores al estrepitoso accidente, en notas informativas oficiales prevalecía cierta indeterminación, admitiéndose la relativa naturaleza del ingenio, y estas sugieren poseer carácter de ser poco asimilables. Digamos que, existen demostrables indicios de selectividad, hay características físicas con cierta codificación  - que  parecen patentizar su procedencia u origen sea cual fuere-  legible, suma  do tecnología complementaria perceptible y no identificada a priori.

Al margen de lo fundamentado, las explicaciones ponían de manifiesto la existencia de fisuras y/o contradicciones entre militares y científicos, aunque, en honor a la verdad, todavía para el señalado día 13 no habían aflorado;  y al parecer, los militares tenían una posición cómoda, no obstante, es obvio que la inquietud existente podía percibirse.

Y, en cuanto al descubrimiento realizado por Rodríguez y sus acompañantes, nada parecía contradecir que, en efecto, vivieron un extraño episodio, porque todavía se guían siendo noticia debido a la presencia (oculta) del traído y llevado aparato.

A escala nacional, hasta ese momento, el destacado Diario de la Marina resaltaba en una de sus páginas con fecha 11 de febrero/ 50, el siguiente titular:

"Afirman que hallaron un Disco Volador en las cercanías de Jovellanos".

Y añade:

"Nuestro corresponsal en Matanzas nos envió un telegrama refiriendo que, según noticias llegadas hasta esa ciudad, un campesino halló un Disco Volador en las proximidades de Jovellanos, y agrega que el disco tiene un dispositivo de radio con la numeración 1 – 13 –U.  La Ciudad de Matanzas aguarda ansiosamente los detalles que puedan ofrecer los técnicos del ejército".

Tres semanas de silencio

Pasaron tres largas semanas de silencio, recibiendo  la opinión pública un gran cúmulo de informaciones sobre avistamientos OVNI, que fluían diariamente amén de que podía conocer, que  nuestros cielos estaban siendo sobrevolados  durante aquellas jornadas, desde la Isla de Pinos hasta Santiago de Cuba, los que fueron extendiéndose hacia otros confines del Hemisferio Occidental y Europa.

Así iban sucediendo los acontecimientos cuando inesperadamente llegó el desmentido oficial, que nunca se atribuyó al ámbito militar.  La ciencia cubana por medio de su mayor vocero, se ocupó terminantemente de, acorde con la nota, esclarecer y asegurar que todo había sido un engaño.

José Carlos Millás, director del Observatorio Nacional, confirmó en un breve comunicado que el disco, no era sino un simple implemento hecho con desechos de otros aparatos, sin significación científica de ninguna clase, confirmando igualmente que el platillo metálico no era otra cosa que una tapa de cazuela, agregando finalmente: lo que se supone sea un aparato, es una parte de uno de las radiosondas del Observatorio Nacional que parece cayó cerca de la localidad.  En su informe a la Marina de Guerra, Millás afirmó que la tapa de cazuela estaba unida a una radiosonda para hacer exploraciones atmosféricas, añadiendo que había mala fe y que merecían castigo los culpables, concluyendo: "se le ha quitado la agarradera a una cazuela".

Definitivamente, la lectura de este escueto comunicado, impulsa obligatoriamente al mejor ejercicio contestatario, condicionado necesariamente por una inferencia lógica del pensamiento analítico– deductivo, nada carente, naturalmente, de interrogantes a saber:

¿Por qué las autoridades competentes no demandaron y encausaron de inmediato a los supuestos mitómanos oportunistas, buscadores de publicidad y violadores de leyes, por las que pudieron ser penalizados antes o con posterioridad a las declaraciones de Millás?

 ¿Por qué en otros poblados no fue observado el paso del OVNI antes de estrellarse?

Si se hubiese tratado de un globo sonda, éste pudiera haberse visualizado en lo alto, transitando diferentes puntos del territorio provincial.

Un globo incendiado no es lo mismo que un globo dejando atrás una estela de luz.

Cuando se piensa en la carencia de imaginación que debieron tener los socorristas criollos para que en pleno siglo XX realizaran tamaña maniobra, ridícula e insensata en detraimiento irresponsable de la propia moral, y que fueron tan poco creativos, que su primera y única misión consistió en dirigirse con el aparato  (todo parece indicar tenía un peso que le permitía a ellos trasladarlo) exactamente al cuartel del Ejército, para engatusar a todos, incluso al equipo de profesionales.

 

Y ahora otra pregunta:

 

¿A que se debió la tardanza en ofrecerse una tan necesaria respuesta pública?

 

Debemos presumir que una vez que el globo sonda estuviera dentro del cuartel, no se tuvo acceso a una investigación imparcial.  Cabe hasta la hipótesis de que el artefacto fuera propiedad de otra nación, Estados Unidos, por ejemplo;  por lo tanto, pudiera haberse tratado de un asunto sin mayores consecuencias, de no tratarse de alienígenas o experimentos muy terrestres cuya secrecía justificaría cualquier argumento poco sustancial. Como fuere, actualmente conocemos que,  precisamente  ese mismo año, en diversas publicaciones estadounidenses, fueron divulgados determinados  encuentros, y se supo  que la  propuesta del platillo terrestre no era pura ficción. Otra cuestión es si los mismo eran y siguen siendo de E. U.  o rusos, cuya matriz en gran medida, puede buscarse hurgando la descollante tecnología alemana prevaleciente hasta 1945.

La explicación dada por Millás era sintomática y adecuada, se había arrogado el derecho de convertirse en juez y fiscal pasando por encima de la policía y las leyes. Los lugareños estaban convencidos de que en aquella madrugada se había avistado un sigiloso aparato volando por encima de sus cabezas. La asombrosa disertación científico- técnica no tuvo presente durante sus declaraciones, que ellas se estaban confundiendo con un petulante titular periodístico, causante de una mayor intoxicación en ese momento. Decía lo siguiente:  " sin significación científica de ninguna clase".

Al margen del desconcertante enrarecimiento mediático causado, es importante señalar que un globo meteorológico SI tiene suficiente valor científico.

Otro aporte válido que sirve para ilustrar con mayor fuerza esta peculiar experiencia, lo hallamos en una radio difusión realizada por el periodista norteamericano Henry Taylor durante el verano de 1950, revelando que un pequeño disco volante de color blanco y 50 centímetros de espesor, había sido descubierto en la bahía de Galveston, Texas.  El platillo pertenecía al gobierno estadounidense según el radio cronista, admitiendo que dicho objeto caído te nía una identificación en letras negra y un número identificativo, advirtiendo que ese proyectil era secreto militar de la fuerza aérea norteamericana.

Embauque, globo, equipo experimental, arma secreta o tecnología foránea, cierto es que lo acontecido en Jovellanos, lejos de dejar mal parados a los que infatigablemente hurgamos   en la verdad OVNI y admitimos su realidad, sirvió  para corroborar que, desde esa  época, toda una maquinaria desinformativa estaba vigente, y el  ocultamiento militar prevalecía, sin  importar el grado de veracidad sostenible.

 

  Encuentros OVNI por aquellas fechas.

Matanzas, prolija  en encuentros relativos al extraño mito extraterrestre  que se niega  a desaparecer, sencillamente  porque no  lo es, recoge otras numerosas historias donde las priorizadas fotos, filmes y otros tipos de encuentros, han  inquietado a  muchos interesados de diferentes sectores durante décadas.

La real naturaleza del inesperado visitante hubo de tornarse por tanto en un misterio,  pero sólo para aquellos que estuvieron desinformados  respecto a  la oleada que hubo de producirse por esos días y semanas en la región caribeña. Una breve reseña de ese periodo filtrada por la prensa local y nacional reflejan con total exactitud, que el notable estrellamiento en Jovellanos no era pura invención, y menos una nota periodística aislada. Tampoco podía tratarse de una trama urdida a partir de un suceso no solventado satisfactoriamente.

En el diario matancero El Republicano del  lunes 30 de enero/1950  (11 días antes de la irrupción aérea y posterior caída del OVNI en Jovellanos) podemos leer:  "Un disco volador en la Isla de Pinos causó impresión en la población".  " En la noche del sábado, numerosas personas vieron un disco volador por encima de Nueva Gerona, en Isla de Pinos.  Dicen que tenía   el tamaño de la Luna.  Serían las 12 AM cuando se vio atravesar velozmente el espacio.  Este fenómeno en su paso no dejó estela luminosa alguna, causando pánico y curiosidad  al unísono". Hasta aquí el cable.

Adelante, diario  provincial matancero del 17 de  marzo / 1950, anunciaba en uno de sus titulares que: "Otro Disco Volador había sido visto el día antes, por un campesino nombrado Mario Hernández Puig en la finca Granero, propiedad de Francisco García, en el término municipal de Perico".  En el despacho también se comunicaba que el Capitán piloto Miguel Murciano, de la Compañía Cubana de Aviación, que volaba entre Camagüey y Antillas observó la noche anterior un plato volador luminoso que pasaba a gran velocidad, fenómeno que igualmente fue visto por los 20 pasajeros del avión.  Apareció a las 10.15 AM, 228 grados respecto al aeropuerto de Antillas, realizando una trayectoria perpendicular al viento reinante.  El OVNI viajaba a una altura de 15,000 pies y se detuvo unos segundos en el cielo. Cuando los pasajeros llegaron a Antillas, numerosas personas aún se encontraban mirando el objeto.  El 21 de ese mes se transmitió que otro Disco era detectado visualmente sobre la ciudad de Camagüey en horas del mediodía.  La radioemisora CMQ  dio la noticia recibida de su corresponsal en aquella Ciudad, y que a las 11 am se estaba produciendo aquella extraña presencia aérea.  En Ciudad Habana se manifestó el fenómeno tres días después, la expectación generada ante  la presencia de un singular punto  brillante, que fuentes gubernamentales con Millás a la cabeza, aclararon se trataba del planeta Venus.  Por su parte el mismo día 17, el  periódico yumurino El  Republicano, anunciaba  el estrellamiento de un cuerpo  no identificado que había siniestrado en Sierra de Morones, estado de Zacatecas, Méjico, que hizo hervir la tierra según los testimonios.

En Enero del propio año la  Revista TRUE MAGAZINE  publicó un artículo  titulado "Fliying Saucers Are Real", escrito por el Mayor Retirado de la Marina de los E.U. Donald Kehoy, donde el mismo planteaba la posibilidad de que los Discos Voladores fuesen naves extraterrestres.

Ovnis son avistados por miembros de la marina estadounidense los días 22 y 23 de Enero, y a su vez, fue  registrado por el radar un objeto sin identificar, a  20  kilómetros al Norte  de la Estación Aérea Naval de Kodiak, Alaska.  Ocho minutos después se observó a 10 millas al Sur Este de la propia Estación. Como resultado se conoció que:

Ningún otro avión volaba en esa zona.

Durante el período comprendido, el operador de radar informó sobre una interferencia intermitente desconocida en dicho radar.

Varios oficiales denunciaron, que el hecho no se correspondía con la presencia de globos sondas, surcando el espacio aéreo del territorio.

2  de  Febrero / 50:  un piloto de bombardero destacado en la base aérea Davis Monthan,  de Tucson Arizona, observa un extraño objeto volador.

5 de Febrero /50:  Un teniente  piloto de combate de la marina  destacado en Berlín, vio dos cuerpos cilíndricos aéreos iluminados. Uno de ellos dejó caer una esfera de fuego, desapareciendo alto y rápido. El evento duró 5 minutos sobre una base aérea militar.

El 3 de Febrero de 1950  alrededor de las 11 pm, un ciudadano argentino nombrado Romeo E Suárez, realizaba un recorrido desde Ushuála a Buenos Aires.  Entre San Sebastián y Río Grande  - a 600 metros de la costa -  pudo oír un sonido raro que provenía de las profundidades.  Y fue entonces, cuando presenció un cuerpo luminoso ovalado que subía del mar, aproximadamente a unos 500 metros de la orilla, elevándose verticalmente, y girando después  rápidamente en ángulo recto, desapareciendo silenciosamente hacia el interior del territorio.

Según aparece en el diario  "El Comercio"  de Mendoza ese mismo mes, este comunica sobre  la preocupación existente por el avistaje de un extraño fenómeno en los canales fueguinos.

8 de febrero 1950, Tampa, Florida  - Tomado del NICAP -

11:45 pm USAF tripulación de bombardero B-29 vieron a 300 pies cohetes de 30 pies de largo  a 2.000  mph. La cercanía geográfica y las cercanas fechas son más que coincidentes.

Por  aquella fecha se emitió un Documento que fuera en años  recientes  desclasificado, y  donde se refleja la secrecía existente por esa época, relacionada con el  tema OVNI,  muy en particular con un reconocido anterior caso de estrellamiento sobre territorio norteamericano.

18 de febrero del año 1950: Noticias provenientes de Copen Hagen, Dinamarca, y divulgada al día siguiente por Los Ángeles Heraldo Expres, daban cuenta del Encuentro Cercano protagonizado por el agricultor danés nombrado Christin Sandersen y su esposa. De acuerdo a lo declarado por  ellos, "un platillo  cruzó  volando  encima del  tejado  de su casa, y, otro más, aterrizaba en terrenos de su propiedad".  Instantáneamente el ingenio aterrizado se desintegró en miles de chispas. Dicho aparato parecía como transparente y brillante en su parte superior. El rotativo californiano también comunicaba que el día 9 de febrero, 24 horas antes del  incidente de Jovellanos, un  residente de Laredo y  un Comandante  llamado  J.L. Kraker, visualizaron una misteriosa  máquina cuya forma se asemejaba  a un cono de helado de unos 30 pies de diámetro.  El cono volador cruzó por encima de la estación naval de Alameda, aproximadamente a unos  5,000 pies de altura, desapareciendo hacia el sureste, y moviéndose a una velocidad de 100 millas por horas, dejando atrás una estela de vapor.

El  22 de Febrero,  pilotos de NAVY observaron un OVNI cercano a Cayo Hueso, Florida;  El objeto fue también captado por el radar. La cercanía a Cuba se evidencia.

 

                                                        

Fig 5. " La foto de un cuerpo celeste luminoso sobre un poblado, refleja cómo pudo haber sido observado el objeto sobre Jovellanos aquella memorable noche, provocando revuelo "

                                                                

El 24 de febrero del año 1950 fue fotografiado un cuerpo luminoso sobre Nuevo Méjico. 

Los Álamos Nuevo Méjico, Febrero 25: Inspectores del Servicio de Seguridad de la Energía Ató mica observaron un cilindro aéreo que oscilaba en el aire.

El 11 de Marzo / 1950 se  reportó por parte del estamento militar chileno destacado en Punta Arenas, Chile, la presencia de No Identificados, a veinticuatro horas del suceso en Cuba.

De  acuerdo a un informe desclasificado en  1973  por  la  USAF, se  había reportado el hallazgo de varios objetos no convencionales por un testigo en Nuevo Méjico, entre ellos uno señala do como un radio magnético y otros accesorios, todo, comenzando 1950.

 

Fig 6   "Objeto cilíndrico fotografiado sobre Nueva York el 20 de marzo del año 1950"

Era titular en  Italia con fecha 23 de marzo / 50 una flamante información sobre el diseño y desarrollo de aviones discoidales, realizados por la Alemania Nazi y los fascistas italianos.

En la bella Ciudad argentina de Necochea fue avistado hacia el mediodía del 25 de Marzo / 50, un luminoso y rápido OVNI por numerosos ciudadanos. En igual fecha era redactado el ya conocido Memorándum - en USA-GUY HOTTEL.

El  lunes 27 de marzo del propio año 50, era  detectado un cuerpo con  forma de disco volador, informaba el capitán venezolano John Power, piloto de la  línea aeropostal AVENZA, que observó hacia el noroeste, sobre Coro y Maiquetía, un ingenio con forma de elipse, color blanco muy brillante. Otro veterano piloto, en esta ocasión particular, Bertram A. Totten, presenció un objeto volador a unos 1000 pies debajo de su aparato, cuando transitaba sobre el condado Feirfax en Virginia, E.U.

En declaraciones a la Revista alemana Der Spiegel el 30 de marzo del año 50, un alegado aviador ex constructor aeronáutico del Tercer Reich que respondía al nombre de Rudolf Shiever, dijo que los nazis habían diseñado y construidos discos voladores, y que él, en pocos meses, podría realizar el modelo denominado Flugelrad, desarrollado en 1944.

Como la fenomenología que nos ocupa muestra ser causal, nos encontramos con otra noticia cuyas fuentes proceden desde Europa, precisamente en la misma fecha del OVNI pinero. La información dice así:  30 de enero/50 (Almansa, España) "Creen en España haber escuchado radio ecos del planeta Marte".  "Desde hace varios días alrededor de media noche, se vienen observando intensas ráfagas fosforescentes que cruzan el firmamento, ignorándose las causas del extraño fenómeno". "Algunos receptores de radio han captado durante el fenómeno, palabras pronunciadas en una lengua incomprensible".

Separados  por miles de kilómetros, se  manifiestan eventos luminosos que se asemejan, y  en medio de tanta incógnita, recepciones radiales nada diáfanas.

Adjudicar a los marcianos  la credencial de  aquellas  posibles señales  parece, partiendo de  nuestros actuales conocimientos sobre el planeta Marte, casi increíble.  No obstante, los hechos  son los  que conforman la  historia, y  cuando hablamos  del planeta rojo, siempre existen argumentos que dan cierto crédito  al archiconocido expediente oculto, sobre la vida pasada y presente del cuarto mundo de nuestro Sistema Solar.

Y ocurrió que el 27 de enero, precisamente del año 1950,  Tshuneo Saheki, astrónomo  japonés, afirmaba haber presenciado a través de su telescopio, una terrible explosión en Marte que hubo de elevarse unos 96 kilómetros fuera de la superficie, saliendo al borde del planeta una nube grisosa de 1448 kilometros de ancho.  Walter Hass, Director de la Asociación Internacional de Observación de la Luna y los planetas en Alburquerque Nuevo Méjico, recabó inmediatamente apoyo mundial para determinar las causas que pudieron motivar aquella súbita  explosión.

Apreciamos que, a priori y a posteriori del escandaloso colisionar del  OVNI  en Jovellanos, estuvieron registrándose de forma nada casual, informes sugiriendo que algo anómalo estaba presenciándose, y que estas anomalías debían darle mayor seriedad a la noticia objeto de análisis, implicando presencia alíen en aquel municipio matancero. Estas informaciones aparecían gradualmente, tornándose raras, sintomáticas e intrigantes en sus nada claros orígenes.

Y como si todo ello fuera poco, adicionamos otro reporte. Dicen los encumbrados de la Ciencia, que la repetición del fenómeno es parte sustancial de su estudio objetivo, sin entender que este aporte solamente aproxima, en el devenir ufológico, hacia una investigación orientada y unitaria entre las distintas ramas del saber humano. Por tanto, lo que si resulta repetitivo son esos informes aparentemente disimiles, poco cohesionados hacia un común denominador, y extrañamente tomados en cuenta más allá de la simple coincidencia. Esa rara acometida de las rachas, tal y como nos sugería siempre Oscar Hurtado, el Padre de la Ufología Cubana.

El  reporte proviene de Cambridge, Massachusetts el 28 de febrero /1950,  apenas tres semanas después del estrambótico evento, hoy nombrado con toda justicia el Roswell Cubano:

 "Descubren misterioso objeto que se aproxima a la Tierra" reza el titular:

"Se mueve a  gran velocidad en el cielo septentrional siendo visto por astrónomos del observatorio de Haward. Los  científicos dicen que está muy lejos de la órbita normal de los asteroides y que no tiene cola como casi todos los cometas".

H. Shapley, director del observatorio, comunicó que es uno de los más extraordinarios objetos  aparecidos en los últimos tiempos, descubierto por C. D. Shane, Director del observatorio Lick en California, que por casualidad el 15/2/50 lo observó a una velocidad poco frecuente.

Por otra  parte, en el observatorio  Monte Hamilton también en California, se hicieron planchas fotográficas de un objeto que serían enviadas a la Universidad de Berkeley.

Reflexionando un poco debemos suponer que, el destacado enigma del denominado objeto 1991 VG,  puede mostrarse en su etapa más temprana. Hablando de analogías, cientificidad  y objetividad, vaya a bien esta verificable muestra,  porque nadie venga ahora con otro chiste contando que, en 1950, había sondas u otros desechos espaciales artificiales terrícolas cruzando el Sistema Solar.

Veamos esta otra sensacional noticia: El cotidiano ecuatoriano La Hora del 12/2/50 se refiere a la caída y rescate de un Disco Volador, cerca del aeropuerto de Laredo, Texas.  Su piloto, un pequeño y agresivo ser, fue recuperado, falleciendo poco después. Este exclusivo con apariencia  patética, aparece como por encanto, de la nada.  A todas luces  comprobamos que el estrellamiento cubano no debió haberse conocido, por lo que en Texas realizaron el inusitado descubrimiento.  Las fechas en que se llevaron a efecto los dos increíbles accidentes si resultan cercanas, y, sin embargo, nada tendenciosas para el investigador imparcial.*1

Hasta donde podemos medir y comprobar, la ufología cubana moderna tuvo un trascendente comienzo, consolidando la base de futuros estudios y evolución en su quehacer investigativo hasta hoy.

 

1* Se comprobó  después que el conocido caso "Tomato Man" había sucedido en 1948.

 

Algo sobre las Sondas Meteorológicas.

 

Los  Radio Sondas viajan hacia la estratosfera, y, en nuestro caso, por aquellos tiempos, eran enviados  desde el  Observatorio Nacional de  La Habana, dos veces al día normalmente. Con un  costo cada uno de 50  dólares, los mismos eran sufragados por el Weather Bureau de Miami, Florida.  Inflados con  gas Helio poseen una fuerza ascensional de 5 ½ libras llegando a superar los 28,000 metros de altura ya en esos momentos. Interesante si se añade que en 1952 estos equipos eran enviados a realizar mediciones atmosféricas a las 10 am, siempre aplicando simultaneidad con los horarios que recaban las leyes internacionales meteorológicas, en las observaciones y también el mismo horario de las estaciones estadounidenses.  Al elevar el  globo al  Radio Sonda, estallará por falta de presión exterior, que no puede resistir la presión interior del globo. Cuando esto sucede, el  paracaídas hará descender lentamente a tierra el Radio Sonda, para dar oportunidad a cualquier persona que lo encuentre, de devolverlo al Observatorio y ser utilizado nuevamente.

El 98 % de los Radio Sondas se pierden siendo recuperables  una cifra insignificante. Un caso archivado ocurrido en Corralillo, Las Villas, resulta ilustrativo por su lejanía territorial.

 

        Fig 7 " Radio sonda en plena labor cotidiana "

 

Esa tecnología tiene en su equipamiento instrumentos como el frecuencímetro electrónico.

Una vez elevado la trayectoria se localiza por medio del Rawen, aparato receptor de frecuencia modulada con antena altamente direccional, que  fija exactamente el  punto del espacio atmosférico del Radio Sonda durante su trayectoria de vuelo, tomando datos que proporcionan cálculos de velocidad y dirección de las corrientes aéreas a diferentes alturas.

Las  operaciones de ascensión de Globos Sondas se hacían cotidianamente tanto en las instituciones de  La Habana  como de Camagüey y Guantánamo.  Posteriormente, estos dispositivos  se  emplean para medir otros parámetros atmosféricos que son  transmitidos en  la frecuencia de 403 MH2 reservada para su uso; y, hoy en día, las  Radio Sondas se comunican por radio con un ordenador que almacena todas las variables en tiempo real.  Anteriormente se observaban desde el suelo con un Teodolito, dando sólo una estimación del viento según la  posición.

 

( Tomado del Archivo INSMET Matanzas )

Consideraciones:  Si en las cercanías de Jovellanos se accidentó un ardiente globo sonda o no, el autor de las anteriores líneas no debe hacer conclusiones todavía. En la primera parte del dossier queda establecido un vínculo entre la provocativa experiencia y el desarrollo de toda una serie inconclusa en cuanto a eventos OVNI en Cuba y otras latitudes, y, a la vez, podemos apreciar esa manera sutil con que manejaron diversas autoridades un hecho concreto que podría tornarse espinoso por sus credenciales.

En una segunda parte abordaremos el trabajo de campo y otros asuntos concernientes al caso de Jovellanos, dignos de tener en cuenta por su meritorio valor ufológico y cultural.

 

Continuará....

 

Bibliografía

Archivo del Autor

Diario Adelante, 17 de Marzo de 1950 , Matanzas, Cuba.

Diario de la Marina, 11 de Febrero del año 1950  Cuba.

Diario El Republicano, 10 de Febrero del 1950 , Matanzas, Cuba.

Diario El Republicano, 30 de Enero de 1950 , Matanzas, Cuba.