GÉMINIS: EL PROGRAMA ESPACIAL TRIPULADO DE LA NASA.

 

Por Nick Redfern

El programa espacial tripulado de la NASA, conocido como Géminis, también estuvo destinado a vincularse para siempre con las ideas de los extraterrestres y los platillos voladores. Esto es lo que la NASA tiene que decir sobre Géminis:

“La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio anunció el 7 de diciembre de 1961 un plan para ampliar el programa de vuelos espaciales tripulados existente mediante el desarrollo de una nave espacial para dos personas. El programa fue designado oficialmente Gemini el 3 de enero de 1962”.

La conexión OVNI de Géminis surgió de una extraña historia que surgió en las páginas de un informe preparado por lo que se conoció como el Comité Condon, un título informal para el proyecto OVNI de la Universidad de Colorado que se desarrolló entre 1966 y 1968, bajo la dirección y el control de físico Edward U. Condon. Como evidencia principal del vínculo entre el proyecto Gemini de la NASA y el misterio de los objetos voladores no identificados, tome nota de la siguiente sección de la documentación oficial generada durante el curso del trabajo del Comité Condon, que se centró en tres eventos de la NASA/OVNI que el comité llegó a creer que no se había resuelto en un grado totalmente satisfactorio. Esos eventos particulares fueron registrados por el comité de la siguiente manera:

Gemini 4, astronauta McDivitt, observación de un objeto cilíndrico con protuberancia. Gemini 4, astronauta McDivitt, observación de una luz brillante en movimiento a un nivel más alto que la nave espacial Gemini. Géminis 7, el astronauta Borman vio lo que él llamó un "fantasma" volando en formación con la nave espacial. El astronauta McDivitt describió haber visto a las 3:00 CST, el 4 de junio de 1965, un objeto cilíndrico que parecía tener brazos sobresaliendo, una descripción que sugiere una nave espacial con una antena.

Es posible que nunca sepamos realmente si el avistamiento de McDivitt fue de un OVNI genuino o, como algunos concluyeron más tarde, del propulsor de la segunda etapa de su propio cohete Titan II. Sin embargo, hay una nota al pie de página conspirativa en este asunto potencialmente importante. Un documento del FBI fuertemente censurado y previamente clasificado del 2 de septiembre de 1965, da todos los indicios de que una fuente dentro de la NASA tuvo acceso a increíbles datos de ovnis que tenían una relación directa y distinta con la misión Gemini 4. Además, registró el FBI, esta misma persona supuestamente tenía la intención de enviar de forma encubierta los datos a personas sin ningún tipo de autorización oficial o vínculo con la NASA, en absoluto.

Según el memorándum del FBI actualmente disponible, la fuente, cuyo nombre permanece completamente eliminado del registro oficial, había informado a los agentes especiales de la oficina del FBI en Pittsburgh, Pensilvania, que dos personas, una de las cuales fue descrita por el FBI como estudiante graduada de la Universidad de Pittsburgh— “conocieron a un empleado de la NASA [nombre censurado por el FBI], y declararon que él les proporciona información por correo sobre objetos voladores no identificados (OVNI) que obtiene de los archivos de la NASA. La fuente cree que la información puede ser clasificada”.

La documentación del FBI sobre este asunto continuó en tonos notables:

La fuente dijo, por ejemplo, que [censurado] había visto una película cinematográfica que mostraba la separación de un misil y un OVNI que aparecía en la pantalla. Previo al vuelo de Gemini 4 [censurado] dijo estar atento a algo interesante porque la nave espacial tenía a bordo 17 dispositivos para detectar ovnis.

Una prueba sólida de que la información divulgada por el empleado de la NASA se consideró algo delicada tanto en su naturaleza como en su contenido se demuestra claramente en un extracto adicional del documento que aún se encuentra en el Archivo del FBI:

[La fuente de la NASA] envía sus cartas a un buzón lejos de la NASA y pone cabellos en el pegamento del sobre para que el destinatario pueda determinar si el sobre fue abierto. Esta fuente afirmó que no tenía motivos para creer que la información se dirigía a ningún extranjero.

Aunque se admite que es de naturaleza breve y que el FBI lo redactó en gran medida antes de su desclasificación, el contenido de este documento particularmente revelador plantea una serie de cuestiones importantes, como:

¿Quién, precisamente, fue el denunciante de la NASA?

¿De dónde, exactamente, estaba asegurando su información OVNI aparentemente clasificada?

¿Qué pasa con las alegaciones de la "Garganta Profunda" de la NASA en el sentido de que Gemini 4 estaba equipado con ciertos dispositivos no especificados para monitorear la actividad OVNI mientras estaba en el espacio?

Cualquiera que sea la verdad de la historia del ovni de Gemini 4, estas curiosas revelaciones que se originaron con el FBI solo pueden dejarnos con una fuerte y persistente sospecha de que es posible que no hayamos escuchado lo último de los ovnis y el programa Gemini de la NASA, ni mucho menos.

Fuente: The NASA Conspiracies- Nick Redfern