Por Martha Jacqueline Iglesias
Herrera.
Antes de entrar en el tema de hoy, he de decir que desde hace unos pocos
años se ha despertado en mí un vivo interés por la tecnología aeronáutica. De
muchos es conocido la tecnología furtiva,
conocida popularmente “de invisibilidad” que emplean los aviones para hacerse indetectables.
Y aunque esta tecnología se hizo notoria en guerras como la del Golfo en 1991 y
la de las Malvinas en 1982, se plantea que la misma ha perdido efectividad
debido a un mejoramiento en los propios radares y sensores.
Para los que se acercan por primera vez a este tema, he de decir que –según
la bibliografía consultada- la tecnología
furtiva siempre ha sido usada por los comandos de operaciones especiales,
pero se refieren más específicamente al diseño y composición del vehículo para
reducir de forma drástica el eco del radar que reflejan.
Este tipo de tecnología es una combinación de varias técnicas: forma del
avión, uso de materiales no metálicos o compuestos para el casco del avión (son
transparentes al radar), pintura radar absorbente (han demostrado ser
problemáticas en situaciones de alta humedad), tecnologías para reducir el
ruido (los aviones furtivos han de volar a velocidad subsónica para evitar el
estampido sónico que se produce al superar la barrera del sonido) y sensores
pasivos.
Sin embargo, en la actualidad, las aeronaves «estrictamente furtivas» se
consideran obsoletas. Los rápidos avances en teledetección y análisis digital
de señales, han hecho que tanto las grandes potencias como los países
intermedios, sean capaces de detectar y atacar a este tipo de aparatos a
distancias cada vez mayores.
Pero, me pregunto: ¿podrán estas aeronaves, en un futuro no muy lejano,
lograr la total invisibilidad de modo que consigan burlar completamente estos
avances exponenciales en su detección?
Veamos, a continuación, cómo pueden los metamateriales revolucionar
nuestros conceptos de la óptica y orientar nuestras expectativas hacia logros
que décadas atrás nos parecían imposibles.
El
Metamaterial. Avance hacia la invisibilidad.
La radio no tiene futuro.
Las máquinas voladoras más pesadas
que el aire son imposibles.
Los rayos X resultarán ser un fraude.
LORD KELVIN, físico, 1899
La creación del metamaterial hace mucho tiempo se consideraba imposible
porque violaba las leyes de la óptica. Sin embargo, en el 2006, investigadores
de la Universidad de Duke en Durham, Carolina del Norte y del Imperial College
de Londres desafiaron la sabiduría establecida, con un gran éxito, utilizando metamateriales
para hacer un objeto invisible a la radiación de microondas. Esta investigación
fue financiada por DARPA (Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de
Defensa) y ha permitido por primera vez en la historia la creación de un diseño
con el que será posible hacer invisibles objetos ordinarios.
Quizá se pregunten, ¿qué es un
metamaterial? A continuación, les explico:
Los metamateriales son sustancias que
tienen propiedades ópticas que no se hallan en la naturaleza. Se crean
insertando en una sustancia minúsculos implantes que obligan a las ondas
electromagnéticas a curvarse de formas heterodoxas.
En la Universidad de Duke los científicos insertaron en
bandas de cobre, minúsculos circuitos eléctricos dispuestos en círculos planos
concéntricos. El resultado fue una mezcla sofisticada de cerámica, compuestos
de fibra, teflón y componentes metálicos. Estos minúsculos implantes en el
cobre hacen posible curvar y canalizar
de una forma específica la trayectoria de la radiación de microondas.
Los metamateriales pueden manipular el índice de refracción (la refracción
es la curvatura que experimenta la trayectoria de la luz cuando atraviesa un
medio), por lo que si se pudiera
controlar el índice de refracción dentro de un metamaterial de modo que la luz
rodeara el objeto, entonces dicho objeto se haría invisible.
Hay que destacar, que los metamateriales son tan extraños y absurdos que
tiempo atrás se creían imposibles de construir, sin embargo, en los últimos
años los “físicos reacios” han tenido que reescribir los libros de textos sobre
óptica, al ser los metamateriales construidos, al fin, en un laboratorio.
Fue el físico soviético Víctor Veselago quien, en 1967, teorizó por primera
vez acerca de los mismos. Y se demostró lo que en cualquier libro de óptica era
imposible: que tenían índice de refracción negativo y efecto Doppler inverso.
Según Nathan Myhrvold, antiguo jefe de tecnología en Microsoft, el
potencial revolucionario de los metamateriales «cambiará por completo nuestro enfoque de la óptica y casi todos los
aspectos de la electrónica. […] Algunos de estos metamateriales pueden hacer
realidad hazañas que habrían parecido milagrosas hace solo unas décadas».
Ya para concluir diré que, con este revolucionario descubrimiento, estas
aeronaves probablemente no sólo serán invisibles al radar como los Ovnis sino también al ojo
humano.
Referencias:
Física de lo Imposible-Michio
Kaku
Wikipedia
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